<h6><strong>Luis Ayllón</strong></h6> <h4><strong>El Gobierno español está muy molesto con el Reino Unido por sus últimas actuaciones en Gibraltar, coincidiendo con el bloqueo de las negociaciones entre Bruselas y Londres sobre el futuro del Peñón, tras el Brexit.</strong></h4> Los británicos <strong>han aumentado en las últimas semanas la presencia de buques de la Royal Navy en la base gibraltareña</strong>, incluidos <strong>submarinos de propulsión nuclea</strong>r; han inaugurado una <strong>terminal especial para militares en el aeropuerto</strong> gibraltareño<strong>; han paseado a un grupo de parlamentarios por las aguas que rodean el Peñón</strong>; y el g<strong>obernador de la colonia, David Steel, ha realizado lo que calificó de “patrulla de soberanía”</strong>, a bordo de una embarcación de la Royal Navy. Fuentes diplomáticas españolas consultadas por<em> The Diplomat</em> consideran que no se trata de una mera coincidencia y aseguran que <strong>se ha presentado una nota verbal de protesta al Reino Unido por el paseo</strong> dado, el pasado 19 de junio, por 15 parlamentarios británicos, todos ellos vestidos con ropas militares, a bordo de los barcos del escuadrón militar de la Royal Nay en Gibraltar el HMS Cutlass y el HMS Dagger, que los condujeron hasta Punta Europa. <strong>Reino Unido considera que se trata de las “aguas territoriales británicas de Gibraltar”, pero España recuerda que no fueron cedidas por el Tratado de Utrecht</strong> y asegura que son de soberanía española. Así lo expone el Ministerio de Asuntos Exteriores en su nota de protesta, en la que <strong>recuerda también que Naciones Unidas condena el uso militar de los territorios no autónomos.</strong> Pese a la protesta, poco tiempo después, <strong>el pasado lunes, día 3, el gobernador de Gibraltar, vicealmirante David Steel, se subió a bordo de otra embarcación de la</strong> Royal Navy, para llevar a cabo lo que calificó, en su cuenta de Twitter, de “patrulla de soberanía” por las mencionadas aguas. España presentará en breve ante Londres una nueva queja por este asunto, aún a sabiendas de que los británicos ignoran todas ellas. Por otra parte, en cuanto a la continua presencia de <strong>submarinos nucleares</strong> en la base militar del Peñón, las fuentes consultadas indicaron a <em>The Diplomat</em> que <strong>la parte británica informa</strong> de las escalas que realizan en el puerto estos navíos. En esas conversaciones, según las mismas fuentes, <strong>el Gobierno español traslada “sistemáticamente” su malestar y reclama al Reino Unido que dé mayores garantías</strong> de que la presencia de esos submarinos no supone un peligro para la población. Las negociaciones entre el Reino Unido y la Comisión Europea sobre el futuro de Gibraltar tras el Brexit (Gibexit) se encuentran paralizadas desde que se conoció el adelanto de las elecciones generales en España, ya que cualquier posible acuerdo necesitaría del visto bueno de las autoridades españolas y, en vísperas de los comicios, parece plenamente descartada cualquier decisión. El Gobierno gibraltareño ha visto con pesar la situación creada, ante el temor de un endurecimiento de las posiciones si el PP llega a La Moncloa, y ayer,<strong> el viceprimer ministro británico, Oliver Dawden,</strong> dijo ante la Cámara de los Comunes, en presencia del ministro principal de la colonia, Fabian Picardo, que el Gobierno de Rishi Sunak <strong>“siempre defenderá al pueblo de Gibraltar y su derecho a determinar su propio futuro”.</strong> Por su parte,<strong> Picardo</strong>, hablando ante el Comité de Escrutinio Europeo del Parlamento británico manifestó que <strong>convocará un referéndum si cree que,</strong> en el acuerdo que se alcance entre Bruselas y Londres, <strong>hay aspectos que cuestionan la soberanía del Peñón</strong>.