<h6><strong>Eduardo González</strong></h6> <h4><strong>El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, asumió ayer “en primera persona” la fuerte derrota del PSOE en los comicios autonómicos y municipales de este pasado domingo y anunció la celebración de elecciones generales anticipadas para el próximo 23 de julio, apenas un mes después de que España asuma la Presidencia del Consejo de la UE.</strong></h4> <strong>“Como presidente del Gobierno y también como secretario general del Partido Socialista, asumo en primera persona los resultados y creo necesario dar una respuesta y someter nuestro mandato democrático a la voluntad popular”</strong>, aseguró Sánchez durante una declaración institucional sin preguntas en el Palacio de la Moncloa. Asimismo, el jefe del Ejecutivo informó de que los comicios anticipados se celebrarán el 23 de julio, que la convocatoria formal aparecerá publicada en el Boletín Oficial del Estado del martes y que ya ha comunicado Rey Felipe VI la convocatoria de un Consejo de Ministros extraordinario (celebrado ayer y que obligó al <strong>ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares</strong>, a suspender su participación en la reunión del Foro de Seguridad Global Globsec, en Bratislava) y la disolución de las Cortes, que tendrá lugar el miércoles para cumplir con los plazos legales. <strong>Según Sánchez, </strong>España está a punto de superar las crisis causadas por la pandemia del COVID-19 y por la guerra en Ucrania con “una senda clara de crecimiento, de creación de empleo y de cohesión social”. Asimismo, prosiguió, a estas alturas de la legislatura, el Gobierno ya ha sacado adelante “las grandes reformas comprometidas en el discurso de investidura, en el programa de Gobierno y también en nuestro acuerdo con la Comisión Europea”. <strong>“Además, nuestro país se dispone a desempeñar una responsabilidad muy importante en este contexto geopolítico que está viviendo Europa y es la Presidencia de turno del Consejo de la Unión Europea”</strong>, recordó. “Todas estas razones aconsejan una clarificación sobre la voluntad de los españoles y las españolas, una clarificación sobre las políticas que debe aplicar el Gobierno de la nación y una clarificación sobre las fuerzas políticas que deben liderar esta fase”, declaró. “Sólo hay un método infalible para solventar estas dudas, ese método es la democracia”, añadió. Por ello, “lo mejor es que los españoles y españolas tomen la palabra y se pronuncien sin demora para definir “el rumbo político del país”, concluyó. <h5><strong>Presidencia española</strong></h5> El Gobierno coalición de Sánchez se conformó tras las elecciones de noviembre de 2019, por lo que, inicialmente, debía concluir su mandato a finales de 2023 o principios de 2024, después de la convocatoria de unas elecciones generales que, casi con toda probabilidad, iban a celebrarse el 10 de diciembre. Finalmente, España acudirá, por primera vez en su historia, a unas elecciones generales en medio de las vacaciones de verano. La Constitución no establece plazos concretos entre la celebración de unas elecciones generales y la investidura del nuevo Gobierno. Normalmente, los partidos suelen tardar un mes para llegar a un acuerdo sobre quién debe ser el presidente del Congreso de los Diputados. Tampoco existe un tiempo establecido sobre la duración de las negociaciones de investidura y la Constitución se limita a fijar un plazo máximo de dos meses entre la primera votación de investidura y la formación del nuevo Gobierno. <strong>En todo caso, las elecciones se celebrarán apenas tres semanas después de que España asuma, por quinta vez, la Presidencia del Consejo de la Unión Europea</strong> -que comenzará el 1 de julio y concluirá el 31 de diciembre- y, por tanto, las negociaciones de investidura y la constitución del nuevo Gobierno condicionarán, muy probablemente, los tres primeros meses de la Presidencia, en los que el país anfitrión estará en manos de un Gobierno en funciones. El semestre español se desarrollará en el último tramo del ciclo institucional europeo, antes de las elecciones al Parlamento Europeo previstas para mayo de 2024 y el posterior nombramiento de una nueva Comisión. Asimismo, incluirá numerosos eventos de alto nivel en una veintena larga de ciudades españolas, incluidas las reuniones informales ministeriales (incluido el Consejo de Asuntos Exteriores de Defensa, que tendrá lugar en Toledo a finales de agosto), los encuentros de representantes permanentes ante la Unión (COREPER), las reuniones de la Comunidad Política Europea (los jefes de Estado y de Gobierno de los 27 países de la UE más países como Reino Unido, Ucrania o Turquía) y del Consejo Europeo Informal de jefes de Estado o de Gobierno de los 27 países de la UE (ambas en Granada a principios de octubre), la Cumbre UE-CELAC (que tendrá lugar a mediados de julio -en plena campaña electoral- en Bruselas, aunque en el marco de la Presidencia española) o la reunión ministerial UE-Balcanes Occidentales en Valencia.