<h4><strong>Irene Lozano</strong></h4> <h5>Directora general de Casa Árabe</h5> <h6><strong>Alberto Rubio</strong></h6> <h4><strong>Al entrar en el despacho de Irene Lozano llama la atención un escritorio mucho más alto de lo habitual. “Llevo con él diez años; ha estado conmigo en el Congreso, en Exteriores”, explica, “y viene muy bien para la espalda, para quemar calorías”. Y no hay duda de que las quema. En el año y medio que lleva al frente de Casa Árabe no ha parado.</strong></h4> <b>Pasa muchas horas trabajando aquí, supongo.</b> Aquí y fuera de aquí. Tenemos muchas actividades. Este año ha sido muy intenso. Hemos creado una red institucional que nos interesa mucho, por supuesto con las otras casas de diplomacia pública, pero también hemos firmado convenios con Efe, TVE, estamos hablando con CaixaForum, el Instituto Cervantes, el Instituto Universitario de la Guardia Civil. Con toda esa red institucional de apoyo hacemos cosas conjuntamente y fuera de aquí. <b>Ya que lo dice, ¿tiene en mente abrir alguna nueva sede de Casa Árabe?</b> Eso es imposible ahora en términos presupuestarios. Pero si que tenemos mucho empeño en un capítulo que llamamos ‘Actos fuera de Sede’. Por ejemplo, en febrero organizamos un concierto de Marwán en el Auditorio Parque Aluche. Vinieron 6.000 o 7.000 personas. En esta sede no podríamos hacerlo porque el aforo máximo es de 500 personas. Y estamos también trabajando con otras instituciones para llevar actos a Barcelona, a Murcia, a cualquier ciudad de España. <b>Tristemente en las últimas semanas el debate sobre el racismo acaparó los medios. ¿Qué pueden hacer las casa de diplomacia pública, como Casa Árabe, para potenciar la tolerancia, el entendimiento?</b> Mucho. Una de nuestras misiones, estipulada en nuestros estatutos, es combatir los estereotipos y los prejuicios, en este caso respecto a la población árabe, que es la que nos concierne. Al llegar yo hicimos un trabajo bastante riguroso para adoptar una estrategia a cuatro años. Y una de las cosas que afloró, sobre la que estamos trabajando mucho, es que el dialogo intercultural ya no se produce sólo de una sociedad a otra sino dentro de los propios países. Por ilustrar el caso, en España viven un millón y medio de árabes, de los que un millón son marroquíes, que tienen una cultura con raíces culturales muy profundas. Y nos dimos cuenta de que facilitando programación de su cultura a esa población podíamos contribuir a que no se desarraigase de su tradición mientras que favorecíamos su integración. Porque cuando el país donde vives te facilita ese vínculo con tu cultura, te hace sentir más amado, mejor acogido. Varias de las iniciativas que tenemos en marcha, que algunas cristalizarán en otoño, están relacionadas con esa idea. <b>¿No convendría también dirigirse a esos que se consideran más españoles que los demás?</b> Indudablemente ahí hay que hacer mucho trabajo. Pero no es el trabajo de Casa Árabe. Ahí deben entrar otras instituciones, la política, la educación. <b>¿Educación es la palabra?</b> La educación es fundamental. También el respeto. Una de nuestras características es que construimos sobre lo árabe en positivo. Trabajamos para destacar sus valores y virtudes. Es verdad que organizamos aquí las jornadas contra el odio cotidiano, en las que participó el Ayuntamiento de Murcia, y obviamente hemos hablado de estos problemas porque la cuestión del odio está subyacente. Es decir, sí que contribuimos al debate pero actuar contra quienes odian o son racistas no es nuestra función. Proyectar una imagen positiva, ése es nuestro trabajo. <b>¿Qué balance hace de este año al frente de Casa Árabe?</b> Uno de los cambios más importantes que hemos visto es que el diálogo intercultural se produce dentro del país. Con la excusa del Mundial, pusimos una carpa para ver los partidos. Vinieron muchísimos marroquíes y también muchos españoles. Fue una experiencia muy bonita ver a todos juntos sin que pasará nada más que las felicitaciones al final. Creo que fue muy revelador y abrió una nueva línea de trabajo con el deporte como diplomacia pública. Hemos proyectado también a <a href="https://www.casaarabe.es/eventos-arabes/show/el-futbol-es-cosa-de-chicas-un-encuentro-con-tres-futbolistas-arabes" target="_blank" rel="noopener noreferrer"><strong>mujeres futbolistas porque queremos hacer hincapié en la igualdad de género.</strong></a> Tuvimos un encuentro con las jugadoras Nouf Faleh Al Anzi (CD Leganés) y Yasmin Mrabet (FC Levante Las Planas) y la ex capitana de la selección palestina Honey Thaljieh. También fueron muy significativas las jornadas empresariales que hicimos en Córdoba con el deporte como vector de movilidad, turismo y sostenibilidad. Hemos hecho además un esfuerzo por proyectarnos fuera. Hemos estado en el Museo de Arte Islámico de Qatar, en la Feria del Libro de Frankfurt, hemos organizado la conferencia de la Asociación Europea de Escuelas de Escritura, en la que por primera vez ha estado representada la literatura en árabe. Y eso nos ha servido para proyectarnos internacionalmente porque vino gente de todo el mundo. <b>¿Es ésa la gran diferencia respecto a su antecesor, el Instituto de Estudios Hispano-Árabes, que Casa Árabe está más cercana a la gente?</b> Creo que en esa época el Instituto era imprescindible para contribuir al conocimiento y formar a muchos arabistas. Ahora mismo hay un elenco de arabistas formidable. Pero cuando se decidió hacer Casa Árabe sobre ese sustrato se buscaba otro tipo de diplomacia pública, no sólo enfocada al estudio del pasado sino al presente y al futuro. Vamos a hacer actividades relacionadas con la COP28, que será en Emiratos, donde se hablará de cambio climático y de las soluciones que necesitamos adoptar. <b>¿Los países árabes colaboran?</b> Sí, en todos los sentidos. Tenemos una relación muy buena con todos. Cuando nos piden organizar algo, nosotros estamos encantados. Uno de los focos-país este año es Marruecos y tenemos la exposición <a href="https://www.casaarabe.es/eventos-arabes/show/mano-sobre-mano" target="_blank" rel="noopener noreferrer"><strong>‘Mano sobre Mano’,</strong></a> que es artesanía y diseño. Pero queríamos mostrar la artesanía de hoy. Y lo hemos hecho con la Embajada de Marruecos. Tenemos todas las fórmulas posibles de colaboración abiertas. <b>¿También desarrollan actividades en el marco de la Alianza de Civilizaciones?</b> Aparte de que es vital para España porque fuimos uno de los principales impulsores y porque el máximo representante es español, los valores que propugna la Alianza están muy alineados con Casa Arabe. Estuve en el Foro de la Alianza en Fez y vamos a hacer más eventos. Tenemos una relación muy estrecha y estamos buscando ampliar la colaboración. <b>¿Qué tal van de presupuesto?</b> Se resume rápido: nos falta. Pero no nos quejamos. Con lo que tenemos hacemos todo lo posible. Y la colaboración con otras instituciones es fundamental. Se pueden hacer cosas con poco dinero integrándote en otros actos. El año pasado comenzamos a hacer <strong>‘Las mil y una noches de la<span class="Apple-converted-space"> </span>Feria de Libro en Casa Arabe’.</strong> Tuvimos un éxito apabullante. Y <a href="https://www.casaarabe.es/eventos-arabes/show/vuelven-las-mil-y-una-noches-de-la-feria-del-libro-en-casa-arabe" target="_blank" rel="noopener noreferrer"><strong>este año hemos intensificado esa colaboración</strong></a>. La creatividad es la manera de suplir la falta de presupuesto, además de nuestros patrocinadores, a los que aprovecho para agradecer su confianza. <b>¿Qué le gustaría decirse a sí misma cuando termine su etapa aquí?</b> Dos cosas. Primera que hemos engarzado mucho más a la sociedad española con Casa Arabe, con énfasis en Madrid y Córdoba, que es donde tenemos nuestras sedes, pero también estamos buscando maneras de hacer algo más masivo, un gran evento que nos permita proyectar a la sociedad española todo lo positivo que hay en la cultura árabe y que a veces pasa un poco desapercibido. Por otro lado tenemos un diamante que es el <a href="https://www.casaarabe.es/p/espana" target="_blank" rel="noopener noreferrer"><strong>Centro de Lengua Árabe</strong></a>, que funciona fenomenal y tiene un prestigio enorme, pero me gustaría sacarlo de aquí. Tenemos más solicitudes de matrícula de las que podemos atender. <b>Eso es un éxito.</b> Si, pero nos tenemos que poner las pilas para atender toda esa demanda e incluso más. Que el centro de lengua saliera de esta sede, que se extendiera por otras zonas de Madrid, Córdoba o del resto de España, y también online, sería otra de las cosas que me gustaría dejar hecha.