The Diplomat
Por iniciativa y organización de la Embajada de Azerbaiyán y en el marco de los actos dedicados al centenario del nacimiento del líder nacional Heydar Aliyev, el pasado miércoles fue regalada al Real Jardín Botánico de Madrid la flor símbolo de Karabaj, Khari Bulbul, traída desde Azerbaiyán exclusivamente para este acto.
El embajador azerbaiyano, Ramiz Hasanov, visitó las instalaciones del Real Jardín Botánico y entregó personalmente la flor a su director, Esteban Manrique Reol, y su vicedirectora de Jardín y Arbolado, María P. Martín.
«Es una flor muy simbólica y muy conocida en Azerbaiyán, señaló el embajador. Pertenece a la familia de las plantas con flor «Ophrys caucasica». Se pueden encontrar varios tipos de esta orquídea en otras partes del Cáucaso meridional y Anatolia oriental. Sin embargo, esta flor en concreto es endémica de la flora de Azerbaiyán y crece principalmente en la región de Karabaj, concretamente en los suburbios de la ciudad de Shusha. Utilizada también como hierba curativa, el periodo de floración habitual del Khari Bulbul coincide con finales de abril y mayo.”
“Los expertos que han estudiado esta flor afirman que se diferencia de otras orquídeas por su elegancia y sensibilidad. Con esta flor única se representa una biodiversidad rica y distinta de Azerbaiyán. En azerbaiyano, Khari significa abeja, y Bulbul se traduce como ruiseñor. El nombre debe su origen al parecido de las hojas de la flor con la abeja y el ruiseñor. Muchas leyendas y otras muestras de folclore están dedicadas a Khari Bulbul», comentó el embajador Ramiz Hasanov.
“El mensaje de paz de Azerbaiyán al mundo entero está vinculado al Khari Bulbul, prosiguió el embajador azerbaiyano. Khari Bulbul es más que una flor. Esta flor simboliza la resistencia, la libertad, la liberación, la alegría, la cultura y el arte de toda una nación. La gente la llama la flor de la Paz y el Amor”.
Habló Ramiz Hasanov de cómo esta flor se convirtió en precursora de la tan esperada paz, estabilidad y prosperidad en la región del Cáucaso Sur. Asimismo, el embajador explicó que “Khari Bulbul se convirtió en un símbolo de paz y amistad en Azerbaiyán, ya que el conflicto de 30 años finalmente ha terminado en la región y existe una oportunidad histórica para lograr una paz duradera.”
Ante este regalo de Azerbaiyán a España, el embajador Hasanov resaltó que “nuestras relaciones bilaterales con España siempre han sido objeto de confianza mutua y buen entendimiento. España goza tradicionalmente de una imagen positiva en Azerbaiyán. En los últimos años del período post-pandémico el nivel de interacción entre nuestros países, en las esferas de la cooperación económica y política aumentó significativamente. Y hoy, como símbolo de amistad y cooperación entre Azerbaiyán y España es un gran placer presentar aquí a Khari Bulbul».
Se ha hecho coincidir el regalo de esta flor, un símbolo de la paz, en la víspera de las celebraciones del centenario de Heydar Aliyev, “una persona que dedicó su vida a lograr una paz duradera en toda la región del Cáucaso Sur, finalizó el embajador Ramiz Hasanov. Junto con todos sus esfuerzos por la paz y la prosperidad de Azerbaiyán, la actividad de Heydar Aliyev, encaminada a convertir la región del Cáucaso en una zona pacífica, permanecerá para siempre en nuestra memoria. Una persona cuya iniciativa fue poner fin a una guerra a principios de los años 90. Como consecuencia de las reformas sistemáticas y efectivas, H. Aliyev convirtió el potencial de Azerbaiyán en crecimiento económico, principalmente para que el país se convirtiera en uno de los principales proveedores de energía de la región. Hoy, como resultado de esas iniciativas, como el «Tratado del siglo XX», Azerbaiyán tiene un papel sustantivo en la arquitectura energética europea, desempeñando un papel significativo y fiable al contribuir a la seguridad energética en sus vecindarios, y principalmente en Europa.”