<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <strong>La vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, ahonda en su desmarque de Pedro Sánchez en cuanto a la relación con Marruecos y el futuro del Sáhara Occidental</strong>, después de que hace un par de semanas calificara al país magrebí como “una dictadura”. Según informa el periodista <strong>Ignacio Cembrero</strong> en<em> El Confidencial</em>, la líder del proyecto Sumar, <strong>acudió el pasado 28 de abril a un acto en el Círculo de Bellas Artes de Madrid</strong>, organizado por el Partido Comunista de España (PCE) bajo el título “Democratizar la economía para avanzar en igualdad”. En ese acto, <strong>Enrique Santiago</strong>, diputado y secretario general del PCE hizo un paréntesis en su discurso para dar la bienvenida a <strong>Abdullah Arabi, el representante del Frente Polisario en España</strong>. Desde el estrado en el que se encontraba ella también, Yolanda Díaz lanzó <strong>beso al aire a Arabi</strong>, y cuando acabó el acto, <strong>se fundió en un gran abrazo con él</strong> y se fotografía en su compañía y en la de Enrique Santiago. El gesto de la vicepresidenta ha suscitado diferentes reacciones en Rabat y en Argel. Así, el diario marroquí digital <em>H24info</em> dio cuenta de lo sucedido en el Círculo de Bellas Artes titulando “<strong>Sáhara: la enésima provocación de la ministra española Yolanda Díaz”</strong>, y subrayando que la vicepresidenta “nunca ha ocultado su animadversión hacia Marruecos”. Además, agregó que actúa así ahora “con el propósito de colocarse en buen lugar de cara a esta etapa electoral”, y sentencias “Una vez más, Sánchez y su equipo deberán actuar como bomberos para no dañar el nuevo camino emprendido por Rabat y Madrid”- Por el contrario, la agencia de prensa oficial de Argelia <em>APS</em>, señaló que <strong>Díaz “renueva su compromiso de apoyo a la lucha del pueblo saharaui</strong>, una actitud, que según columnistas argelinos, avala la tesis del presidente del país, Abdelmajid Tebboune, quien ha asegurado en varias ocasiones que el cambio en la política exterior de España era una decisión “individual” de Sánchez que no contaba con el respaldo de ninguna fuerza política. La propuesta de <strong>Sumar en relación con el Sáhara Occidental sostiene, a diferencia del planteamiento de Sánchez que “cualquier solución duradera del conflicto pasa por una negociación con el Frente Polisario que respete el derecho de autodeterminación del pueblo saharaui”</strong>. Al efectuar hace algo más de un año su giro en la política sobre el antiguo territorio español, Sánchez calificó la propuesta de autonomía de Marruecos como “la más sería, creíble y realista” para solucionar el contencioso.