<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, anunció ayer que el Gobierno presentará próximamente una nueva estrategia de cooperación con los países árabes, diez años después de que se pusiera en marcha el programa ‘Masar’.</strong></h4> Albares hizo esta afirmación al clausurar el<strong> seminario ‘Tendencia y retos de la Cooperación al Desarrollo en el Mediterráneo’, organizado, en Casa Árabe, por el Instituto Europeo del Mediterráneo (IEMed) y la Agencia Española de Cooperación Internacional al Desarrollo (AECID)</strong> para reevaluar la estrategia de la ayuda española a la región. En su intervención, el ministro reiteró que los países de la orilla sur del Mediterráneo son una "parte absolutamente prioritaria" de la política exterior española, y dijo que<strong> la nueva estrategia es necesaria, tras una década en que ha estado vigente el programa ‘Masar’ (‘Camino’, en árabe).</strong> Recordó Albares que ese programa estuvo centrado inicialmente en programas de gobernanza a los que posteriormente se incorporó la igualdad de género, hasta convertirla en su "seña de identidad", y al que ahora se ha incluido un tercer pilar, el del agua. <strong>"Tenemos que ser más eficaces, tener mayor impacto, ayudar más a la estabilidad y prosperidad del Mediterráneo, que es la nuestra propia"</strong>, señaló el ministro, quien incidió en que la nueva estrategia debe tener en cuenta que se trata de una región con una población mayoritariamente joven y que busca oportunidades. Albares, subrayó que España puede entender su pasado y su presente sin el Mediterráneo, -"y tampoco queremos", dijo- y debe construir su futuro mirando hacia este mar. Por lo que respecta a la situación<strong> en Sudán, el ministro aseguró que España no abandonara a ese país, tras haber evacuado de Jartum al embajador</strong> y al personal de la Embajada, junto con una treintena de españoles. Albares, que se felicitó del resultado de la operación de evacuación llevada a cabo por su departamento en colaboración con el de Defensa, dejó claro que el país africano, escenario de combates entre el Ejército sudanés y las paramilitares Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF) desde el pasado 15 de abril, no va a desaparecer de la acción exterior española. "Vamos a sumar fuerzas para que la paz regrese a Sudán y para que el proceso de transición que estaba teniendo lugar no decaiga y se retome el diálogo entre sudaneses", prometió el jefe de la diplomacia española.