<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>La Comisión Europea advirtió ayer de que la proposición de ley presentada por PP-A y Vox en el Parlamento autonómico andaluz para regularizar regadíos en el entorno natural “podría degradar el humedal protegido de Doñana” y va en contra de una sentencia del Tribunal Superior de Justicia (TJUE) sobre este tema, por lo que Bruselas utilizará “todos los medios” para proteger el cumplimiento de la “legislación medioambiental comunitaria”.</strong></h4> Así se manifestó <strong>el comisario de europeo de Medio Ambiente, Virginijus Sinkevicius</strong> (citado por un portavoz), tras recibir <strong>al consejero andaluz de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul, Ramón Fernández-Pacheco</strong>, quien se desplazó a Bruselas para exponer la “verdad” sobre esta proposición de ley. Según declaró posteriormente el consejero a la prensa, esta ley “en absoluto perjudica al acuífero de Doñana” porque no se basa “en el agua de Doñana”, que “es para el Parque Natural”, sino en el uso de aguas que “vendrían siempre en superficie a través de un trasvase que el Gobierno de España prometió por ley en 2018, y cuya infraestructura ni siquiera ha comenzado”. Según un portavoz comunitario, Adalbert Jahnz, Sinkevicius trasladó a Fernández-Pacheco que “<strong>la Comisión está profundamente preocupada porque la legislación andaluza planteada, si se aprueba como se ha propuesto, podría degradar el humedal protegido de Doñana, uno de los mayores de Europa y de suma importancia para la coherencia de la Red Natura 2000”. </strong> <strong> </strong> A juicio del comisario, la ley podría ir <strong>en contra de la sentencia del TJUE de junio de 2021, en la que se condenó a España por no respetar la directiva marco del agua y la directiva de hábitats en el humedal de Doñana</strong>. De acuerdo con las mismas fuentes, <strong>“las medidas adoptadas hasta ahora por España para hacer frente a los incumplimientos declarados por el Tribunal de Justicia no son suficientes, incluso sin el probable impacto negativo de la normativa propuesta, que parece ir en sentido contrario”.</strong> Por todo ello, <strong>“de prosperar la proposición de ley del Parlamento Andaluz se estaría produciendo una violación flagrante de la sentencia del Tribunal de Justicia de la UE”</strong> y, en tal caso, <strong>“la Comisión tomaría en consideración la adopción de todas las medidas necesarias, incluido un nuevo recurso ante el TJUE en el que solicitarían sanciones económicas”.</strong> La Comisión Europea también advirtió a la Junta de que <strong>“existen pruebas sólidas de que la agricultura intensiva y los centros turísticos cercanos están relacionados con la desecación o la reducción de los estanques en Doñana, lo que demuestra que los niveles actuales de explotación de las aguas subterráneas son insostenibles y requieren medidas urgentes para controlar las extracciones”. </strong> Según el comisario, y en respuesta a los argumentos de la Junta, la ley propuesta sí afecta al humedal, “aunque solo sean aguas superficiales”. En estas circunstancias, prosiguió Bruselas, el proyecto de ley crearía “un marco jurídico favorable para el reconocimiento de derechos de uso de aguas pluviales y derechos de uso de aguas superficiales que se sumarían a la presión excesiva sobre las masas de agua subterránea ya sobreexplotadas”. El comisario Sinkevicius aseguró que es consciente <strong>“de la importancia del riego para la economía local”, pero “la legislación de la UE exige un uso sostenible del agua y la conservación de los lugares protegidos, en beneficio de todos los usuarios del agua y de todos los usuarios de los servicios ecosistémicos, especialmente en el clima actual de severo estrés hídrico”. </strong> <strong> </strong> <strong>“Los valores naturales excepcionales de Doñana deben preservarse, ya que son importantes para Andalucía, España y la UE en su conjunto. Es probable que un mayor deterioro del estado de las masas de agua subterránea tenga efectos desastrosos para la conservación de los frágiles ecosistemas de los humedales de Doñana, uno de los puntos críticos de biodiversidad de la UE”</strong>, añadieron las fuentes comunitarias.