<h6><strong>Eduardo González</strong></h6> <h4><strong>El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, inicia mañana un viaje a China que tendrá un doble (e importante) componente económico y político y que servirá de avanzadilla a las visitas que próximamente efectuarán a Pekín otros líderes europeos para abordar la propuesta del presidente Xi Jinping sobre el conflicto bélico causado por Rusia en Ucrania.</strong></h4> <strong> </strong> El viaje de Sánchez va a ser pionero en dos aspectos muy concretos: <strong>se trata de la primera visita de un líder occidental desde el reciente desplazamiento de Xi a Moscú para entrevistarse con el presidente ruso, Vladimir Putin, y del primer encuentro de un líder internacional con el recién nombrado primer ministro chino, Li Qiang</strong>. Aparte, Sánchez será seguido, en próximas fechas, por otros líderes europeos: <strong>el presidente de Francia, Emmanuel Macron; la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen; la primera ministra de Italia, Giorgia Meloni, y, muy probablemente, el Alto Representante para Política Exterior y de Seguridad de la UE, Josep Borrell.</strong> Según indicaron fuentes de Moncloa, son numerosos los líderes de la UE interesados en buscar vías de concertación y una agenda positiva con China frente a los desafíos internacionales y en trasladar a Xi su opinión respecto a su propuesta de paz en Ucrania. A juicio del Gobierno español, tal como ya comentó la semana pasada Pedro Sánchez en Bruselas, los doce puntos de la propuesta china tienen algunos elementos interesantes que incluso coinciden con algunos puntos del plan de paz del presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, como la reafirmación del principio de integridad territorial de los Estados y el rechazo rotundo al uso, e incluso a la mera amenaza del uso, de las armas nucleares. Aparte, el Ejecutivo español considera positivo que China haya decidido dar un paso adelante y participar más activamente en este problema. No obstante, la UE y China mantienen importantes diferencias con Pekín en algunos puntos, entre ellos la equidistancia que se aprecia en la propuesta china entre agresores y agredidos. <strong>Estos puntos, según las citadas fuentes, se van a tratar durante el encuentro de Sánchez con Xi. Asimismo, cualquier mensaje que el presidente del Gobierno vaya a trasladar al mandatario chino se habrá coordinado previamente con el resto de la UE</strong>, tal como se suele hacer en cualquier interlocución con los actores internacionales, incluida China, en todo lo relativo a Ucrania. Según las mismas fuentes, el presidente del Gobierno será el primer dirigente occidental que aborde personalmente con Xi (por cualquier vía) su propuesta sobre Ucrania. Durante el Consejo Europeo de la semana pasada en Bruselas, Sánchez aseguró ante la prensa que había hablado sobre su viaje a China con algunos de sus colegas de la UE, “como no podía ser menos”. . <h5><strong>Foro de Boao y Pekín</strong></h5> En todo caso, la primera etapa de Sánchez en China tendrá un carácter marcadamente económico con su intervención en el <strong>Foro de Boao</strong> para Asia (FBA por sus siglas en inglés), que está considerado como el ‘Davos asiático’ y, que desde 2001, se reúne anualmente en esa ciudad costera de Hainan, la provincia más meridional de China, para analizar asuntos políticos y económicos. El foro -actualmente presidido por el exsecretario general de la ONU Ban Ki Moon- suele invitar todos los años a líderes no asiáticos para la jornada de inauguración y, en esta ocasión, uno de los invitados es Pedro Sánchez, quien pronunciará unas breves palabras con contenido económico. Aparte, el presidente del Gobierno mantendrá un encuentro bilateral con la directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, para abordar la situación económica mundial. El viernes, Pedro Sánchez desarrollará toda su agenda política y económica en <strong>Pekín</strong>, donde será recibido por las tres máximas autoridades políticas de la República Popular China, tal como se suele hacer con las visitas de alto nivel político. Por la mañana, mantendrá un encuentro bilateral y un almuerzo con <strong>el recién nombrado primer ministro,</strong> <strong>Li Qiang</strong> (nombrado el pasado 11 de marzo). Posteriormente, se reunirá con <strong>el presidente del Comité Permanente de la Asamblea Nacional Popular, Zhao Leji</strong> (también nombrado en marzo) y mantendrá varios encuentros con representantes de empresas españolas en China (hay alrededor de 800 en el país), con empresas chinas interesadas en invertir en España y con turoperadores chinos, a quienes se transmitirá el interés de España por volver a ser un destino turístico importante para el turismo de alta calidad chino, después del parón causado por la pandemia. Por la tarde, el presidente del Gobierno será recibido por Xi Jinping. Durante estos encuentros, además de los asuntos internacionales, se abordarán importantes cuestiones bilaterales en el contexto del cincuentenario del establecimiento de las relaciones internacionales, con especial atención al r<strong>elanzamiento de los mecanismos de concertación acordados durante el viaje de Estado de Xi a España en 2018 </strong>(como la Comisión Mixta de Cooperación Económica e Industrial o los diálogos y consultas políticas sobre Iberoamérica y otros temas), que no se han podido activar a causa, entre otros factores, de la pandemia del COVID-19.