The Diplomat
El ministro principal de Gibraltar, Fabian Picardo, defendió ayer que lo que necesita el Peñón no es «un acuerdo rápido» entre la UE y Londres sobre este territorio sino uno que no tenga «consecuencias negativas» para los gibraltareños, al tiempo que aseguró que, en ningún caso, habrá cesiones en lo relativo a la soberanía, a cambio de acceso a la Unión Europea.
Así lo manifestó en su Mensaje de Año Nuevo, después de que en las últimas semanas el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, haya recalcado que la negociación entre Reino Unido y la UE para un acuerdo sobre la relación futura con Gibraltar tras el Brexit no puede prolongarse «eternamente» después de la propuesta global planteada por España y Bruselas.
Picardo explicó a los gibraltareños el estado en que se encuentran las negociaciones. «Nunca vamos a ceder ni un ápice de soberanía británica a cambio de derechos de acceso a la UE para personas, mercancías, vuelos, etcétera», afirmó, «sin matices ni margen para la duda».
Pero también, incidió en que lo que se está «negociando con la UE es enormemente complejo» puesto que abarca «desde el etiquetado de los productos a la fiscalidad de los bienes» de ahí el que auguró que probablemente el acuerdo final tendrá «cientos de páginas», informa Europa Press.
Lo importante, según Picardo, es «acertar en todos los aspectos para garantizar que no haya consecuencias negativas para nuestra economía o nuestra autonomía». Por eso, se mostró «convencido» de que los gibraltareños comparten la posición adoptada por el Gobierno británico y del Peñón en la negociación.
«Sé que ustedes entienden por qué las negociaciones están siendo tan largas. Sé que ustedes rechazan la idea de que podríamos haber logrado un tratado seguro más rápidamente», afirmó, incidiendo en que «cualquier sugerencia en ese sentido carece de sinceridad».
Picardo dijo que se niega a creer que los gibraltareños quieren que acepte «un acuerdo rápido y no el acuerdo correcto si se puede conseguir». Dicho esto, les garantizó que Londres y Gibraltar seguirán «trabajando infatigablemente para lograr un acuerdo» y que no aceptarán «concesiones en los aspectos fundamentales».
En este punto, reiteró que el Peñón está preparado igualmente para el caso de que no haya acuerdo, al tiempo que hizo hincapié en que tampoco será posible «mantener la normalidad anterior al Brexit» Pese a ello, «sigo confiando en que existe una vía hacia un tratado que no nos obligue a ceder en aspectos fundamentales» y aunque el acuerdo «puede resultar incómodo en algunos ámbitos, como también ocurrió seguramente cuando Reino Unido entró en la UE en 1972, la ausencia del mismo «también será muy incómoda», dijo el ministro principal.
«Si llegamos a un acuerdo, como creo que haremos, será un acuerdo seguro. Y no afectará de ningún modo a nuestra soberanía, jurisdicción o control exclusivamente británicos sobre Gibraltar», puntualizó, recalcando que «la realidad es que Gibraltar es ahora irreversiblemente británico».
«El trabajo que estamos haciendo para lograr un tratado no cambiará eso, ni nuestra Constitución, ni nuestra soberanía, ni la soberanía de ninguna parte del territorio, las aguas territoriales o el espacio aéreo de nuestro preciado Gibraltar», remarcó Picardo.