<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, propuso ayer la celebración de una cumbre entre la UE y los líderes del Mediterráneo durante la próxima Presidencia española, en el segundo semestre de 2023.</strong></h4> <strong>El Gobierno desea “situar la agenda euro-mediterránea en el centro de su Presidencia” y, por ello, una cumbre entre la UE y líderes del Mediterráneo “sería el colofón” a ese “acento euro-mediterráneo”</strong> al que aspira España, declaró Albares en la rueda de prensa posterior al <strong>VII Foro Regional de la Unión por el Mediterráneo (UPM)</strong>, que se celebró ayer en la Fundación Joan Miró de Barcelona. El objetivo de esta cumbre sería reunir a los jefes de Estado y Gobierno de los 27 países de la UE con sus homólogos de Marruecos, Argelia, Túnez, Libia, Egipto, Israel, Palestina y Jordania. La última cumbre euro-mediterránea se celebró en 2008 en París. Si prosperase la idea, sería la segunda cumbre birregional durante la Presidencia española, junto a la de UE y América Latina y el Caribe (UE-CELAC) en Bruselas. <strong> </strong> <strong>Albares participó ayer en la inauguración del VII Foro Regional, que reunió a los ministros de Asuntos Exteriores de los 42 Estados miembros de la UpM</strong> (los 27 países de la UE más otros 15 países de ambas riberas del Mediterráneo (Albania, Argelia, Bosnia y Herzegovina, Egipto, Israel, Jordania, Líbano, Marruecos, Mauritania, Mónaco, Montenegro, Palestina, Túnez, Turquía y, en calidad de observadora, Libia; Siria congeló su participación en la UpM en diciembre de 2011). Argelia, que retiró a su embajador en Madrid en marzo pasado, envió a su representante ante la UE. El<strong> ministro de Asuntos Exteriores de Argelia, Ramtan Lamamra</strong>, se encuentra en Niamey, capital de Níger, para participar en una reunión del Consejo Ejecutivo de la Unión Africana. La lista se amplió ayer con la entrada de un nuevo Estado miembro, <strong>Macedonia del Norte</strong>, con cuyo ministro de Exteriores, Bujar Osmani, mantuvo un encuentro bilateral Albares para abordar “los retos de la región euro-mediterránea”, profundizar “nuestra cooperación en el seno de la OSCE y la OTAN” y trasladar “el apoyo de España al camino europeo” de su país, según informó el ministro a través de Twitter. Se trata de la primera adhesión desde la creación de la UpM en 2008. Durante su intervención, <strong>Albares </strong>abogó por superar los desequilibrios entre las dos orillas del Mediterráneo a través de tres objetivos: más integración, mayor sostenibilidad y mayor cohesión. Asimismo, anunció que <strong>la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID) firmará un acuerdo con la Fundación Anna Lindh, valorado en medio millón de euros, para proyectos de inclusión social en la región euro-mediterránea.</strong> <strong> </strong> Por su parte, el <strong>Alto Representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell</strong>, afirmó que se deben intensificar los esfuerzos para “cerrar la brecha” entre las dos orillas del Mediterráneo, “una de las fronteras más desiguales del mundo”, e instó, con ese fin, a fortalecer la integración regional y a fomentar la “conectividad, tanto desde el lado de las infraestructuras como desde el lado regulatorio”. Precisamente, durante el Foro Regional se presentó <strong>el proyecto Medusa</strong>, un cable submarino de fibra óptica de 7.100 kilómetros de longitud que unirá por primera vez las dos riberas del Mediterráneo. Según el comisario europeo de Vecindad y Ampliación, Olivér Várhelyi (con quien también se reunió Albares), se espera que esté operativo a finales de 2024 o principios de 2025, con una vida útil estimada en 25 años. Entre las iniciativas regionales aprobadas ayer por la UpM destaca <strong>el proyecto <em>Capitales Mediterráneas de la Cultura</em></strong><em>,</em> en función del cual los 43 países de la organización designarán anualmente dos ciudades de las orillas norte y sur del Mediterráneo como <em>Capitales del Mediterráneo </em>para fomentar actividades y encuentros culturales, socioeconómicos y deportivos, y poner de relieve el patrimonio de las ciudades y el entendimiento mutuo entre las dos orillas. Albares también se reunió ayer con el ministro de Asuntos Exteriores y Expatriados de Jordania (y copresidente de la UpM), Ayman Safadi; y sus homólogos de Bosnia y Herzegovina, Bisera Turkovic; Italia, Antonio Tajani; Palestina, Riad Malki; Mauritania, Mohamed Salem Uld Merzug; y Libia, Najla Elmangoush. <h5><strong>UE-Vecindad Sur</strong></h5> Por la tarde, la <strong>Fundación Joan Miró de Barcelona acogió también la cuarta reunión ministerial entre la UE y la Vecindad Sur</strong>, que estuvo centrada en la nueva agenda del Mediterráneo de 2021 (desarrollo urbano, resiliencia, transformación digital, paz y seguridad, migraciones y movilidad y transición verde), las consecuencias de la guerra en la región en materia de seguridad energética y crisis alimentaria y la propia arquitectura institucional de la Vecindad Sur, que está menos estructurada que la Vecindad Este. El encuentro congregó a los ministros de Exteriores de los 27 Estados de la UE y a nueve países de la ribera sur del Mediterráneo: Argelia, Egipto, Israel, Jordania, Líbano, Libia, Marruecos, Palestina y Túnez. La participación de Siria está suspendida. Se trata del cuarto encuentro entre ambos bloques desde 2015 (cuando se celebró la primera edición, a la que siguieron otras dos en 2018 y 2021). Precisamente, según informaron fuentes de Exteriores, uno de los grandes objetivos de España es, precisamente, conseguir que este encuentro se celebre con una mayor periodicidad y con el mismo grado de representación institucional que la reunión entre la UE y la Vecindad Este.