<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>El embajador de Chile en España, Javier Velasco, y el exvicepresidente del Gobierno y exlíder de Podemos Pablo Iglesias mostraron ayer su sintonía política y defendieron la implicación de las empresas españolas durante la nueva etapa presidencial en el país sudamericano.</strong></h4> “Las chilenas y chilenos convivimos permanentemente con las empresas españolas”, declaró el embajador durante su intervención en <strong>un desayuno informativo de Nueva Economía Fórum en el que fue presentado por Pablo Iglesias. </strong> Según Velasco, <strong>las relaciones entre Chile y España son muy buenas “tanto en los aspectos políticos como los económicos”, incluido el empresarial</strong>. “Buena parte de nuestra economía y de nuestra recaudación fiscal se basan en la inversión extranjera, y el tercer inversor más grande en Chile es España”, por detrás de Estados Unidos y de Canadá, destacó el embajador. <strong>Las empresas españolas “son fundamentales” para Chile</strong>, “porque llevan capitales (...), modifican el ambiente empresarial chileno (...) y llegan con estándares empresariales del primer mundo y eso cambia la situación”, aseguró. “En términos públicos, la transferencia que existe, la circulación de ideas institucionales, la circulación de procesos políticos entre Chile y España es potentísima”, declaró Velasco. Por ello, prosiguió, <strong>la Presidencia española de la Unión Europea </strong>-que tendrá lugar en el segundo semestre de 2023- “es una tremenda posibilidad para que la visión que ya está en la nueva Ley de Cooperación Española se expanda el resto de Europa” y para que “Europa mire a América Latina” como “una alternativa a un mundo tremendamente polarizado como el que estamos viviendo”. “Juntas podemos ser esa alternativa”, añadió. Asimismo, el embajador afirmó que, <strong>pese al rechazo a la nueva Constitución en el plebiscito del pasado 4 de agosto, “el proceso sigue”,</strong> puesto que la redacción de una nueva Carta Magna para reemplazar a la de Augusto Pinochet fue aprobada por “un 78% de la ciudadanía chilena”. “Lo que podría entenderse como un traspié del proceso, es simplemente el rechazo de este texto constitucional”, prosiguió. “Las fuerzas políticas chilenas tenemos un deber, que es mirar con humildad esos resultados” y buscar “mecanismos de diálogo que permitan acercarnos y fortalecer este hito tan importante para nuestra República, que arrastra hace ya décadas una institucionalidad heredada de la dictadura”. Durante la presentación del acto, <strong>Pablo Iglesias</strong> aseguró que su “amigo” Velasco pertenece a “una generación excepcional de jóvenes chilenos” que “supieron leer los anhelos de transformación” de la población del país, que se materializaron en el “estallido social” de 2019 y terminaron llevando a la Presidencia a Gabriel Boric. Asimismo, aseguró que el nuevo embajador ha demostrado que, <strong>para Chile, “la relación con España es una prioridad absoluta” y destacó, en ese sentido, el “compromiso de Javier Velasco para estrechar los lazos con las empresas españolas que trabajan en Chile o quieren trabajar en Chile”</strong>. A juicio de Iglesias, el nuevo Gobierno chileno es “un referente en justicia social y medioambiental” tanto para su país como sus “socios comerciales”, como es el caso de España.
