<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>La vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, anunció ayer su rechazo al Plan de Reducción de la Demanda de Gas presentado ayer por la Comisión Europea porque “España ha hecho los deberes, gastando más que otros países, para garantizar la seguridad del suministro” y, “a diferencia de otros países”, no ha vivido “por encima de sus posibilidades desde el punto de vista energético”.</strong></h4> <strong>La Comisión propuso ayer un nuevo instrumento legislativo y un Plan Europeo de Reducción de la Demanda de Gas con el que se pretende reducir el consumo en un 15 % hasta la próxima primavera.</strong> “La Unión Europea corre el riesgo de afrontar nuevos recortes en el suministro de gas procedente de Rusia, dado que el Kremlin está utilizando sus exportaciones de gas como arma y casi la mitad de nuestros Estados miembros ya se han visto afectados por la reducción del abastecimiento”, declaró la Comisión en un comunicado. Por ello, “tomar medidas ahora puede reducir tanto el riesgo como los costes para Europa en caso de perturbaciones adicionales o totales, reforzando la resiliencia energética europea”, añadió. Con este Plan, la Comisión insta a “todos los consumidores, las administraciones públicas, los hogares, los propietarios de edificios públicos, los proveedores de electricidad y la industria” a “tomar medidas para ahorrar gas” y se compromete a acelerar “los trabajos relativos a la diversificación del abastecimiento, incluida la adquisición conjunta de gas, a fin de reforzar la posibilidad de que la UE obtenga suministros alternativos de gas”. Para ello, Bruselas propone <strong>un nuevo Reglamento del Consejo relativo a la adopción de medidas coordinadas para la reducción de la demanda de gas que “fijaría un objetivo para todos los Estados miembros: reducir la demanda de gas en un 15 % entre el 1 de agosto de 2022 y el 31 de marzo de 2023”.</strong> El nuevo Reglamento también brindaría a la Comisión la posibilidad de declarar, previa consulta a los Estados miembros, <strong>una “alerta de la Unión”</strong> sobre la seguridad del suministro, e imponer una reducción obligatoria de la demanda de gas a todos los Estados miembros. “<strong>Los Estados miembros deben actualizar sus planes nacionales de emergencia antes de finales de septiembre para mostrar cómo se proponen alcanzar el objetivo de reducción, e informar a la Comisión cada dos meses sobre los progresos realizados”</strong>, añadió la Comisión. Para ayudar a los Estados miembros a lograr las reducciones de la demanda necesarias, la Comisión también ha adoptado un <strong>Plan Europeo de Reducción de la Demanda de Gas que establece medidas, principios y criterios para una reducción coordinada de la demanda</strong>. El Plan se centra en la <strong>sustitución del gas por otros combustibles y en el ahorro energético global en todos los sectores</strong>. Su objetivo es salvaguardar el abastecimiento a los hogares y los usuarios esenciales, como los hospitales, pero también a las industrias que son decisivas para el suministro de productos y servicios esenciales para la economía, así como para las cadenas de suministro y la competitividad de la UE. El Plan proporciona directrices que los Estados miembros deben tener en cuenta a la hora de planear la reducción. <h5><strong>Rechazo de España</strong></h5> Tras la publicación de la propuesta de Bruselas, Teresa Ribera declaró en una rueda de prensa que <strong>el Gobierno se opone a “la imposición de obligaciones que están por encima de lo que se les exige a otros socios”, ya que, aseguró, “España ha hecho los deberes, gastando más que otros países, para garantizar la seguridad del suministro” y nuestro país “es la puerta de entrada de más del 30% del gas natural licuado (GNL) de Europa”</strong>. Por ello, anunció, <strong>el Ejecutivo de Pedro Sánchez acudirá “con una propuesta propia al Consejo de Ministros de Energía” de la próxima semana</strong>. El objetivo del Gobierno, precisó, es que a España se le rebajen del 15% al 10% las exigencias de reducción del consumo de gas, teniendo en cuenta la capacidad española de reexportación de gas a Europa. <strong>“Pase lo que pase, las familias españolas no van a sufrir cortes de gas ni de luz en sus casas. Pase lo que pase, España va a defender la posición de la industria española”</strong>, declaró. “Queremos ayudar, pero que no se nos impongan soluciones que no son ajustadas ni eficaces para lo que se pretende”, prosiguió. <strong>“España lleva dos décadas pidiendo que se cumplan las obligaciones de interconexión, bien a través de las medidas ordinarias o de las extraordinarias que se invocan hoy, y a pesar de ello ha habido una inacción de la UE. Por eso somos una casi isla energética, lo que limita la capacidad de ayudar”</strong>, recordó. <strong>A juicio de Ribera, no se puede pedir “un sacrificio desproporcionado” a España porque “la situación de cada país es distinta, resultado de esfuerzos pagados por los consumidores domésticos e industriales”.</strong> “Nuestra capacidad de almacenamiento está en el 80% y la del resto de Europa en el 50% gracias a las inversiones acomedidas en los últimos 25 años, disponemos de más de un tercio de la capacidad de regasificación y almacenamiento de Europa, ya hemos aplicado un plan invernal y hemos conseguido una posición que nos permite decir que la propuesta de la Comisión no es la más eficaz, ni la más justa”, aseveró. “Reducir de forma homogénea la demanda de gas sin tener en consideración el mix energético, responsabilidad de cada Estado, no necesariamente es una propuesta neutra”, advirtió. “No nos pueden exigir un sacrificio sobre el que no nos han pedido opinión”, porque, “<strong>a diferencia de otros países, no hemos vivido por encima de nuestras posibilidades desde el punto de vista energético”,</strong> declaró Teresa Ribera, parafraseando las acusaciones de que fue objeto España por parte de los países del Norte de Europa tras la crisis financiera de 2008. “No permitiremos propuestas que nos hagan sufrir por encima de otros socios”, manifestó.
