Trabajar en otro país es una de las principales metas de los profesionales que buscan un mayor crecimiento profesional fuera de su país de residencia, y es que hay países que ofrecen excelentes condiciones de trabajo y, a su vez, sueldos muy atractivos.
Eso sí, ten en cuenta que mudarte a otro país no es como mudarte a otra ciudad de tu territorio natal. Como extranjero debes considerar ciertos aspectos para que tu búsqueda de empleo sea legal, fácil y fructífera, sobre todo, si planeas residenciarte a largo plazo.
Así que si estás considerando la opción de emigrar a otro país en busca de mejores oportunidades labores, quédate leyendo, aquí te damos 5 consejos que te ayudarán.
Las 5 recomendaciones para conseguir empleo en el extranjero
Vivir y trabajar en otro país es más que un sueño para muchas personas, es parte de sus propósitos personales y profesionales, es un trampolín para proyectar su carrera a un mercado más competitivo, más exigente y, por supuesto, mucho más lucrativo.
¿Qué considerar para buscar empleo en el extranjero? Aquí tienes una serie de consejos:
1- Compara y analiza los destinos según tu presupuesto
No se trata de elegir el país con las ciudades más hermosas, sino de enfocar la elección con base en tu presupuesto, principalmente, pues el costo de vida es distinto en cada país y tu motivo de viaje es generar ingresos extras o hacer una carrera profesional.
Así que, primero, determina con cuánto presupuesto dispones para viajar y mantenerte, por lo menos, tres meses, de acuerdo con tus posibilidades económicas.
Para que te sea más sencillo, escoge varias opciones de países, compara y analiza sus condiciones laborales, sueldos de tu profesión u ocupación y costo de vida.
2- Toma en cuenta el idioma del país
Esto es muy importante si quieres aspirar a mejores oportunidades profesionales, porque el dominio de lenguas extranjeras te ayuda a sumar puntos en tu candidatura. Por esto también es esencial que conozcas cuáles son los idiomas más demandados.
Asimismo, es fundamental que tengas un dominio mínimo del idioma oficial del país al cual quieres emigrar para que te sea más sencillo conseguir trabajo.
3- Tramita los permisos legales
Por lo general, los extranjeros necesitan contar con un permiso o visa de trabajo para ejercer su profesión u ocupación, también debes incluir este punto en tu investigación.
En el caso de España, los tratados de la Unión Europea permiten a sus ciudadanos trabajar en los países miembros sin la necesidad de un permiso o una visa de trabajo, solamente con el pasaporte o el DNI podrías aspirar a un empleo dentro del marco europeo.
Ahora bien, si quieres emigrar a un país fuera de la Unión Europea, investiga qué permisos necesitas para vivir y trabajar legalmente y comienza a tramitarlos enseguida.
4- Haz la convalidación de tus títulos académicos
En el caso de que seas egresado de una carrera universitaria, investiga qué requisitos solicitan en tu país destino para ejercer tu profesión, puesto que algunos países exigen la homologación o convalidación de los títulos universitarios para poder buscar trabajo.
Si vas a emigrar a un país cuyo idioma oficial no sea el español, tus documentos académicos deben estar traducidos por un traductor certificado para garantizar la precisión de la traducción. Esto es vital para que puedas iniciar el proceso de convalidación y, posteriormente, presentar tu título profesional como un aval de tu formación.
5- Adapta tu curriculum vitae al formato del país
Un currículum en inglés, por ejemplo, no tiene el mismo formato que un currículum español, hay varios detalles que cambian, como el hecho de que el primero no debe incluir una foto.
Es esencial que adaptes tu CV a la normativa del país destino, esto favorece tu imagen profesional, agrada a los reclutadores y puede ayudarte a avanzar en la contratación.
Como ves, buscar trabajo en el extranjero implica una preparación más allá del equipaje. No es imposible aspirar a empleos fuera de tu país, pero sí es necesario que investigues y planifiques tu viaje para aumentar tus oportunidades profesionales, siempre priorizando tu estatus legal, tus posibilidades económicas y, sobre todo, adaptándote a la cultural del país.