<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <strong>Los permisos de conducir expedidos por las autoridades de Venezuela han dejado de tener validez en España debido a su “inseguridad jurídica” y a las “dificultades para determinar su autenticidad”.</strong> El pasado martes, el Consejo de Ministros aprobó la suspensión de la aplicación del Canje de Cartas entre España y Venezuela constitutivo del Acuerdo sobre el reconocimiento recíproco y el canje de los permisos de conducción nacionales, un tratado internacional firmado en Caracas el 16 de mayo de 2005 y que entró en vigor para ambas partes el 26 de agosto de 2005. En agosto de 2017, según informó el Consejo de Ministros, comenzaron a surgir problemas en la aplicación del acuerdo debido a que <strong>las autoridades competentes venezolanas habían empezado a expedir un nuevo modelo de permiso de conducción en formato PDF, en sustitución del tradicional permiso en forma de tarjeta plástica, que podía ser descargado e impreso por su titular cuantas veces lo deseara.</strong> Por ello, y <strong>“para solventar la situación de inseguridad jurídica producida por las dificultades para determinar la autenticidad de los permisos de conducir venezolanos”, se propuso en una nota verbal, a instancias de la Dirección General de Tráfico (DGT), proceder a la suspensión de la aplicación del Canje de Cartas</strong>, en virtud del artículo de la Convención de Viena sobre el Derecho de los Tratados de 1969, y, en paralelo, negociar con Venezuela una enmienda que permitiera establecer una prueba común de control de conocimientos para los solicitantes del equivalente venezolano de los permisos de conducción españoles del grupo 1, “realizando las correspondientes modificaciones en el Canje de Cartas”. Asimismo, se consideró conveniente tratar de llegar a un acuerdo con las autoridades venezolanas, a través de la vía diplomática, sobre la necesidad de suspender la aplicación mutua del acuerdo. Tras la última tentativa, materializada en una nota verbal de 28 de diciembre de 2021, y una vez agotada la vía diplomática al no haber obtenido resultado alguno hasta la fecha, los responsables del Ministerio de Asuntos Exteriores encargados de las relaciones con Venezuela “confirmaron la conveniencia de solicitar la aprobación de dicha suspensión”.