<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, recibió ayer en el Palacio de La Moncloa al primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, con quien constató la “profunda sintonía personal y política” que les une, “basada en los mismos valores compartidos de defensa de los derechos humanos, la democracia, el Estado de Derecho, el feminismo y la igualdad de género”.</strong></h4> Se trata <strong>de la primera visita oficial a España de Trudeau</strong>, quien se encontraba en Madrid para participar en la Cumbre de la OTAN. Aparte, <strong>la de ayer fue la primera visita de trabajo de un primer ministro canadiense a nuestro país en los últimos 20 años y, casualmente, el encuentro bilateral se produjo 40 años después de la visita oficial a España del entonces primer ministro Pierre Trudeau, padre del actual</strong>. En efecto, Pierre Trudeau visitó España en junio de 1982 cuando se dirigía a Bonn para participar, precisamente, en una Cumbre de la OTAN. Durante aquella estancia en Madrid, Trudeau padre aprovechó para felicitar al Gobierno de Leopoldo Calvo Sotelo por la reciente entrada de España en la Alianza Atlántica. Durante la reunión de ayer -la octava entre ambos líderes-, Sánchez y Trudeau firmaron <strong>una declaración conjunta</strong> (que actualiza la Declaración Agenda de Cooperación Canadá-España, adoptada en Montreal en 2018) en la que reafirmaron su defensa del orden internacional basado en el respeto a las normas, expresaron su determinación de “proteger la democracia y el Estado de derecho”, reafirmaron su “compromiso con la OTAN”, condenaron en “los términos más profundos la injustificable agresión de Rusia contra Ucrania” e instaron a Rusia a retirar sus fuerzas de este país. Asimismo, la declaración indica que la emergencia climática es “el desafío más importante de nuestra era”, asegura que los dos países están “decididos” a acelerar su acción en este terreno mediante inversiones en energía renovable y tecnologías limpias y reclama la intensificación de la Acción Global por el Clima para “conseguir reducir a la mitad las emisiones de gases de efecto invernadero para 2030, con el objetivo de alcanzar el cero neto para 2050”. El texto defiende también la necesidad de proteger el “bienestar” de la población “ante la amenaza de inestabilidad económica e inflación" y anuncia el compromiso de España y Canadá para intercambiar buenas prácticas en el “patrocinio comunitario de refugiados”. La declaración destaca también “la creciente importancia que está adquiriendo en Canadá la lengua española” y recoge el interés mutuo en profundizar iniciativas culturales compartidas y en establecer vínculos más firmes entre investigadores, profesores y estudiantes. <strong>“Somos países aliados, socios estratégicos, amigos, nos unen vínculos de todo tipo: históricos, institucionales, comerciales, de inversión, también personales. También nos une una visión compartida sobre el mundo”,</strong> declaró Pedro Sánchez durante una comparecencia conjunta ante la prensa, sin preguntas, con Justin Trudeau. “España y Canadá somos de los orgullosos pocos países que tenemos una política exterior feminista que ya está dando sus frutos”, prosiguió el jefe del Ejecutivo, quien recordó también la cooperando en materia de seguridad y defensa, concretamente en la misión de la OTAN en Letonia (que lidera actualmente Canadá), e hizo un llamamiento a las empresas canadienses para que inviertan en España aprovechando los fondos europeos de recuperación económica. “Cuente con España, somos un aliado sólido, un amigo, y estamos dispuestos a trabajar en pro de un mundo más moderno, pacífico e inclusivo”, añadió dirigiéndose a Trudeau. Por su parte, el primer ministro canadiense agradeció a pueblo español por la “exitosa Cumbre” de la OTAN, destacó también los “valores compartidos” en materia de cambio climático, derechos de las niñas y las mujeres y la lucha contra la desigualdad a través de su “política exterior feminista”, y aseguró que <strong>Canadá y España “son voces fuertes en la defensa de la democracia” y que es “es bueno para todos” que haya “voces progresistas que defienden la democracia y la lucha contra los totalitarismos, la violencia y las violaciones de derechos humanos”</strong>. “Ha sido divertido trabajar contigo, amigo mío”, añadió, dirigiéndose a Pedro Sánchez.