The Diplomat
El Rey Felipe VI aseguró ayer que si algo ha puesto de manifiesto la guerra en Ucrania es que la «lucha entre la tiranía y la democracia» sigue aún vigente y que la OTAN es, en este contexto, más relevante que nunca y supone un «faro de libertad» que hay que proteger. Asimismo, recordó que las amenazas para Europa también llegan por el sur.
Durante su intervención en el Foro Público organizado por el Real Instituto Elcano y otros ‘think-tank’ europeos en los márgenes de la cumbre de la OTAN en Madrid, Don Felipe destacó que Europa se enfrenta hoy en día «a una vecindad cada vez más inestable, tanto en el este como en el sur, y al complejo desafío de un mundo crónicamente impredecible”, informa Europa Press.
El Rey también subrayó que «los acontecimientos en y en torno a Europa se verán probablemente afectados cada vez más por fuerzas exógenas» y llamó la atención sobre el hecho de que «el foco del crecimiento económico mundial, la competencia militar y la rivalidad tecnológica se está dirigiendo hacia el Indo-Pacífico«, en clara referencia a China pero sin mencionarla expresamente.
Los líderes de la OTAN tendrán que decidir en esta cumbre, según el Rey, el «equilibrio correcto entre responder a las amenazas inmediatas en el este de Europa y la necesidad de hacer frente a los desafíos a largo plazo y sistémicos«, también el equilibrio entre la dimensión política y militar de la Alianza y prepararla para «competencia entre grandes potencias sin perder de vista otros desafíos como el terrorismo o el nexo entre clima y seguridad”.
Para ello, apostó por mirar más allá de los confines del espacio euroatlántico. En este sentido, afirmó que España está en una «posición ideal» para acercar la OTAN a América Latina y África, «tanto geopolíticamente como por nuestra voluntad compartida de servir como puente entre el Atlántico, Europa y el Mediterráneo».