<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>La embajadora de Marruecos, Karima Benyaich, participó ayer en la sede de Casa de África en Las Palmas de Gran Canaria en la reunión del ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, con los embajadores africanos acreditados en España.</strong></h4> <strong>La sede de la institución de la diplomacia pública española acogió ayer la decimosegunda reunión del Consejo Diplomático de Casa África, que por primera vez se ha realizado fuera de Madrid y ha coincidido con el Día de África</strong>, que se conmemora cada año el 25 de mayo. El Consejo Diplomático está compuesto por los embajadores africanos acreditados en España, actúa a través de una comisión permanente y está presidido por el decano de los embajadores africanos. <strong>Tras el encuentro, el ministro presidió un almuerzo ofrecido a los embajadores africanos acreditados en España</strong>, con los que repasó los retos que la política exterior del Gobierno se ha fijado en el marco del XII Consejo Diplomático Casa África. “En el Día de África, me he reunido con embajadores africanos en Casa África, en Las Palmas, para analizar nuestra política exterior hacia el continente”, declaró Albares a través de su cuenta de Twitter. “Las relaciones políticas, culturales y económicas con los países africanos son prioritarias para España”, añadió. <strong>La secretaria de Estado de Asuntos Exteriores y Globales, Ángeles Moreno Bau</strong>, también asistió al almuerzo. Entre los asistentes se encontraba <strong>Karima Benyaich</strong>, quien regresó el pasado mes de marzo a Madrid después del cambio de postura del Gobierno de Pedro Sánchez sobre el Sáhara Occidental, que ha allanado el camino para la recuperación de las relaciones bilaterales. La embajadora había sido llamada a a consultas por Rabat a mediados de mayo de 2021 en protesta por la acogida en un hospital español del líder del Frente Polisario, Brahim Ghali. El regreso de Benyaich se produjo sólo un día después de que Argelia anunciara la llamada a consultas de su embajador en España, Said Moussi (quien, obviamente, no estuvo en Las Palmas), precisamente para expresar su malestar por el viraje del Gobierno respecto al Sáhara Occidental. En declaraciones a la prensa, la embajadora afirmó ayer que Marruecos es “un país amigo de España y un socio estratégico, con el que quiere estrechar más los excelentes lazos” y aseguró que es “un honor” retomar las relaciones bilaterales. Asimismo, aseguró que Rabat tendrá en cuenta los intereses de Canarias en la negociación de las aguas territoriales.