En los últimos años, en el mercado español y en el internacional ha comenzado a aparecer un término relevante tanto para empresas como para clientes. Se trata de la palabra inglesa cashback, que en nuestro idioma podría traducirse como reembolso de dinero. Gracias a este sistema de compras los consumidores pueden recibir dinero en su cuenta corriente o Paypal por sus pedidos digitales.
El método parece tener ventajas para todos, clientes, tiendas en línea y empresas de cashbacks. Pero, ¿es posible que realmente todos salgan beneficiados? La respuesta es sí y aquí te vamos a contar cómo funciona.
¿Cómo es el sistema detrás de las empresas de cashback?
Estamos acostumbrados a que en las transacciones no todo sean ventajas para las dos partes. Con el sistema de cashbacks, no hay solo dos partes, sino tres, que tienen beneficios.
Aunque parezca complejo, la realidad es que el método es muy simple tanto de usar como de entender. La primera parte empieza con un acuerdo entre las tiendas en línea (también conocidas como tiendas asociadas) y la compañía de cashbacks. Aquí se firman las bases de cómo va a funcionar su trabajo conjunto.
El resumen es que los comercios digitales van a dar una cantidad a la empresa de cashbacks de dinero por cada cliente que entre a su página usando la web de cashbacks. ¿Cuánta es esta cantidad? Depende del acuerdo. Por este motivo, el porcentaje de reembolso final varía según la tienda en la que compre el usuario.
Una vez que este contrato está establecido, la compañía de cashbacks coloca a esta tienda en su sitio web, ofreciendo a los consumidores una cantidad de reembolso de dinero por cada compra. Este monto corresponde a una parte de lo que la tienda asociada paga a la empresa de cashback. Es decir, el negocio de los reembolsos está en “sacrificar” una parte de los beneficios que te da el comercio electrónico para entregárselo al consumidor.
Y así es como todas las partes de este engranaje salen beneficiadas: la tienda en línea consigue mayor visibilización, visitas y compras, la empresa de cashbacks consigue un porcentaje de dinero por cada compra realizada a través de su web y los consumidores se hacen con reembolsos por cada pedido en línea.
En definitiva, los cashbacks no son nada más y nada menos que una rama del marketing de afiliación y un sistema interesante al que cada vez se unen más consumidores de todo el mundo.