<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, aseguró ayer que el envío de armamento pesado a Ucrania por parte de la OTAN “no está ahora mismo encima de la mesa”, a pesar de las peticiones efectuadas en este sentido</strong> <strong>por las autoridades de Kiev durante la reunión ministerial de la Alianza.</strong></h4> <strong>“Nosotros tomamos las decisiones concertadamente y eso ahora mismo no está encima de la mesa”,</strong> declaró el ministro a la prensa con motivo de la reunión de los responsables de Exteriores de la Alianza, celebrada los días 6 y 7 de abril en Bruselas, y después de que su homólogo ucraniano Dimitro Kuleba, pidiera a los aliados el envío de aviones, misiles antibuque, vehículos blindados personales y sistemas pesados de defensa aérea. Tanto Kuleba como la propia OTAN advirtieron ayer de que habría que empezar a no diferenciar entre material ofensivo y material defensivo en el caso del conflicto de Ucrania, un cambio de criterio que podría facilitar el envío de carros de combate para combatir a las fuerzas rusas. <strong>“Es cierto que uno tiende a diferenciar el material militar en defensivo u ofensivo, pero yo creo que la verdadera diferencia es en manos de quién está: todo el material militar en manos del ejército de Vladimir Putin es ofensivo y todo el material militar en manos del Ejército ucraniano es defensivo para defender su democracia, su integridad territorial, su soberanía y a los civiles indefensos”</strong>, afirmó Albares. “España ya está ayudando con material militar, con ayuda humanitaria, con sanciones, con apoyo político; estamos en primera línea de todas las decisiones que están tomando los europeos y los aliados transatlánticos, la última, expulsar a 27 diplomáticos de España”, agregó el ministro. Aparte, Albares <strong>se entrevistó ayer en la sede de la OTAN con Kuleba para transmitirle “el apoyo, el compromiso y solidaridad de España y del pueblo español con Ucrania y sus ciudadanos”</strong> y asegurarle que España “ahora todo lo posible” para que su país “pueda sobrevivir”. Asimismo, mantuvo un encuentro con <strong>el secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken</strong>, también en los márgenes de la reunión de la OTAN. “Unidos en la defensa de Ucrania. Preparando la Cumbre OTAN de Madrid en junio”, declaró a través de su cuenta de Twitter. “Apreciamos el apoyo inquebrantable de España en hacer rendir cuentas a Rusia y a presionar por el fin de la guerra injustificada que eligió Putin”, declaró Blinken a través de la misma red social. <h5><strong>Stoltenberg, Borrell y las nuevas sanciones de la UE</strong></h5> La OTAN, como tal organización, ha advertido de que no enviará tropas al terreno ni aplicará una zona de exclusión aérea, pero los países aliados sí están suministrando de forma bilateral armas antiaéreas y antitanques, así como equipos y suministros médicos. En rueda de prensa, <strong>el secretario general de la Alianza Atlántica, Jens Stoltenberg</strong>, declaró ayer que “los aliados de la OTAN están proporcionando muchos tipos diferentes de armas, incluidos sistemas más pesados, sistemas avanzados y también sistemas que pueden derribar aviones”, aunque precisó que no es la Alianza la que está enviando este armamento, sino los Estados miembros a título individual. Asimismo, Stoltenberg explicó que, durante la reunión de ministros, los aliados “condenaron totalmente los horribles asesinatos de civiles en Bucha y otros lugares recientemente liberados del control ruso” y apoyaron “los esfuerzos para una investigación internacional”. Los ministros también acordaron que “el próximo concepto estratégico de la OTAN deberá ofrecer una respuesta sobre cómo nos relacionamos con Rusia en el futuro y, por primera vez, también deberá tener en cuenta cómo afectan a nuestra seguridad la creciente influencia y las políticas coercitivas de China”. “El Concepto Estratégico estará terminado para la Cumbre de Madrid en junio y será la hoja de ruta para la adaptación continua de la Alianza para el mundo más peligroso y competitivo en el que vivimos”, añadió. Por su parte, <strong>el alto representante de la Unión Europea para la Política Exterior y de Seguridad, Josep Borrell</strong>, insistió a su llegada a la reunión de la OTAN en que Ucrania necesita “más armas, menos aplausos y más armas”. “Lo importante son las cuestiones prácticas, más recursos, más capacidad militar para resistir la agresión rusa”, añadió el exministro español, quien también anunció que el Consejo de ministros de Exteriores de la UE empezará a debatir el próximo lunes en Bruselas sobre la posibilidad de imponer nuevas sanciones al gas y al petróleo ruso. Precisamente, el <strong>Parlamento Europeo</strong> aprobó ayer, por amplia mayoría, una resolución para pedir más sanciones a Rusia, incluido el <strong>“embargo total e inmediato de las importaciones rusas de petróleo, carbón, combustible nuclear y gas”</strong>. Esta medida debería ir acompañado de un plan para seguir garantizando la seguridad del abastecimiento energético de la Unión y una estrategia para “levantar cada una de las sanciones en caso de que Rusia adopte medidas para restablecer la independencia, la soberanía y la integridad territorial de Ucrania dentro de sus fronteras reconocidas internacionalmente y retire completamente sus tropas del territorio de Ucrania”.
