<h6><strong>Eduardo González</strong></h6> <h4><strong>El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, presidirá hoy en Madrid la III Asamblea General de la Alianza por el Sahel, cuya celebración coincide con la creciente preocupación por el futuro de Mali y por el auge de la presencia rusa en la región.</strong></h4> <strong>Los 26 miembros de la Alianza por el Sahel y sus socios se reúnen a nivel ministerial a través de su Asamblea General, que se celebra una vez al año</strong> y cuyo objetivo es hacer balance del año transcurrido, reforzar el diálogo con los socios del G5 y determinar las directrices estratégicas para el año siguiente con el fin de responder mejor a las necesidades y prioridades de la zona, según informó el Ministerio. Este año, <strong>la tercera Asamblea General estará presidida por España y se celebrará en la sede del Ministerio, en la Plaza Marqués de Salamanca de Madrid</strong>. “Este ejercicio permitirá dar cuenta de los logros alcanzados por la Alianza en 2021 y establecer directrices estratégicas que permitan garantizar la continuidad y el refuerzo de las intervenciones en el ámbito del desarrollo para lograr una mejora duradera de las condiciones de vida de las poblaciones del Sahel, en un complejo contexto político y de seguridad”, prosiguió Exteriores. Al término de la Asamblea, Albares comparecerá en una rueda de prensa conjunta con Mahamat Hamid Koua, presidente del Consejo de Ministros del G5 Sahel y ministro chadiano de Economía, Planificación del Desarrollo y Cooperación internacional. <strong>La Alianza por el Sahel, el organismo que coordina los fondos de desarrollo que se destinan a los países del G5 Sahel, fue creada en julio de 2017 por Francia, Alemania y la UE, junto al Banco Africano de Desarrollo y el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).</strong> Desde entonces se han unido a esta iniciativa numerosos países, entre ellos España. La Alianza reúne actualmente a 26 socios bilaterales y multilaterales, 17 como miembros de pleno derecho y nueve como observadores. <strong>La anterior ministra de Asuntos Exteriores, Arancha, González Laya, asumió la presidencia de turno de la Asamblea General de la Alianza por el Sahel el 24 de junio de 2020. </strong> <strong>La celebración de la tercera Asamblea se produce en un momento delicado para la seguridad en el Sahel a causa de la situación en Mali.</strong> El pasado mes de febrero, Francia y otros países aliados anunciaron la retirada de sus tropas en este país implicadas en las misiones internacionales <em>Barkhane</em> – para la lucha antiterrorista- y <em>Takuba</em> -formada por unidades especiales de distintos países europeos- por sus discrepancias con la junta militar de Bamako y en protesta por la presencia en el país de los mercenarios rusos del Grupo Wagner. <strong>España no forma parte de estas misiones, pero aporta actualmente el mayor contingente (500 militares, el 24% del total) de la misión europea de entrenamiento EUTM Mali</strong>. España ha insistido reiteradamente en que cualquier decisión sobre esta misión debe ser adoptada por el conjunto de la UE y ha advertido de que una retirada precipitada de Mali podría degenerar en “otro Afganistán”, además de dejar un espacio vacío que podrían ocupar otras potencias, como China o Rusia, en este caso a través del Grupo Wagner. <strong>El pasado 21 de marzo, los ministros de Asuntos Exteriores de la UE decidieron en Bruselas darse “un poco más de tiempo” antes de decidir sobre la continuidad o no de la misión europea</strong>, a la espera de que el alto representante de Política Exterior y de Seguridad de la UE, Josep Borrell, “reciba, si recibe, una respuesta a sus comunicaciones con la junta militar en Mali”, según declaró Albares durante la rueda de prensa. Una vez que llegue esa respuesta, los Gobiernos de la UE deberán “decidir si se dan las condiciones para mantenerse sobre el terreno y decidir si el Gobierno de Mali muestras signos definitivos de avanzar en su transición democrática y qué es lo que espera de la misión”. Durante la reciente cumbre de la OTAN, celebrada el pasado 24 de marzo en Bruselas y que estuvo casi exclusivamente dedicada a la invasión rusa en Ucrania, <strong>el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez</strong>, reiteró su apoyo al fortalecimiento de la postura de disuasión y defensa en el Flanco Oriental, pero pidió también que se preste el mismo interés al Flanco Sur y al “potencial desestabilizador” que representa la creciente presencia de Rusia en el Sahel. “El Sur es también el Este”, subrayó.
