<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>Ayer entró en vigor el Convenio de doble nacionalidad entre España y Francia, que permitirá a los ciudadanos de ambos países adquirir la nacionalidad del otro sin tener que renunciar a la de origen. Francia se convierte así en el primer país ajeno al ámbito iberoamericano con el que España mantiene un convenio de esta naturaleza.</strong></h4> <strong>“Este convenio, suscrito en la ciudad francesa de Montauban hace un año, salda una deuda histórica con el exilio republicano, al tiempo que refuerza los derechos de ciudadanía de españoles residentes en Francia y de los franceses en España, lo que supone una mejora de sus condiciones en el país de residencia”</strong>, indicó el Ministerio de Justicia en una nota de prensa. El texto, que “será publicada en el BOE de forma inminente”, beneficiará también, con efecto retroactivo, a cualquier ciudadano español o francés que, con anterioridad a la fecha de ayer, hubiera adquirido la nacionalidad del otro país después de haber renunciado a la propia. A partir de ahora, estas personas “pueden acogerse a lo establecido en este nuevo Convenio y disfrutar de su doble nacionalidad desde la fecha en la que lo soliciten”. “Dicho texto, que tiene un gran valor simbólico e histórico, pretende acabar con la asimetría que existe entre Francia y España en materia de doble nacionalidad y reforzar los vínculos entre nuestros dos países”, declaró ayer <strong>la Embajada de Francia en España</strong>, que destacó el hecho de que se permita recuperar la nacionalidad española “a los españoles que han perdido su nacionalidad de origen al adquirir la nacionalidad francesa”. “De esta forma, se reconoce las profundas raíces de la presencia española en Francia, marcada por la acogida de más de 500.000 refugiados en el momento de la retirada de 1939 o por la contribución de los españoles al desarrollo de Francia de la posguerra: los 600.000 españoles que vivían en Francia en 1969 representaban en aquel entonces la primera comunidad extranjera del país”, añadió. <strong>Hasta la fecha, España solo mantenía convenios de doble nacionalidad con países de Iberoamérica</strong>, concretamente con Chile (1958), Perú (1959), Paraguay (1959), Nicaragua (1961), Guatemala (1961), Bolivia (1961), Ecuador (1964), Costa Rica (1964), Honduras (1966), República Dominicana (1968), Argentina (1969) y Colombia (1979). El convenio fue acordado por ambos Gobiernos en septiembre de 2020 después de unas negociaciones que comenzaron en marzo de 2019. El primer anuncio oficial se produjo en julio de 2020 en París durante una rueda de prensa conjunta entre <strong>la entonces ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, y su homólogo francés, Jean-Yves Le Drian, en presencia del entonces embajador de España en Francia y actual jefe de la diplomacia, José Manuel Albares</strong>. El acuerdo, según declaró ese día González Laya, envía “una señal muy clara a los más de 275.000 españoles residentes en Francia y un guiño a los más de 125.000 franceses residentes en España”. Finalmente, <strong>el convenio fue firmado el 15 de marzo de 2021 por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el presidente de la República francesa, Emmanuel Macron, durante la XXVI cumbre hispano-francesa</strong>, celebrada en Montauban, en el suroeste de Francia.
