The Diplomat
Los embajadores de Finlandia y Suecia en España, Sari Rautio y Teppo Tauriainen, respectivamente, confirmaron ayer el acercamiento de ambos países a la Alianza Atlántica, tras la invasión de Ucrania por Rusia.
En un encuentro con la prensa celebrado en la Embajada de Suecia, Rautio y Taurianen indicaron que, según las encuestas, ha aumentado el apoyo a la unión a la OTAN por parte de la opinión pública en los dos Estados, y agregaron que algunos partidos políticos finlandeses y suecos ya se han posicionado a favor del ingreso.
La embajadora de Finlandia precisó que los partidos finlandeses de corte conservador han estado más «abiertos» a esta posición, mientras que en la izquierda el apoyo es menor.
El embajador sueco se expresó en la misma línea, admitiendo que hay diferencias en el seno de la política del país. Así, explicó que el Gobierno ha puesto en marcha un «grupo de trabajo con partidos de la oposición para analizar la situación de seguridad y defensa y los partidos conservadores ya han adelantado su intención de tratar el asunto. «Los conservadores han dicho que si ganan las elecciones de septiembre van a proponer que Suecia solicite la entrada en la OTAN, si hay mayoría en el Parlamento», indicó Tauriainen, quien, no obstante, matizó que el Gobierno ya ha expresado su intención de mantener «la línea» seguida durante los últimos años.
Tanto Rautio como Tauriainen, que resaltaron su cooperación con la Alianza, coincidieron en minimizar las advertencias lanzadas por Rusia a Finlandia y a Suecia de que su adhesión a la OTAN comportaría «graves repercusiones político-militares», que exigirían «una respuesta» rusa.
La embajadora finlandesa afirmó que estas «amenazas» no son nuevas y las «han oído varias veces». «Está claro que no les gustaría que formáramos parte de la OTAN, el mensaje no es distinto, lo que ha cambiado es el entorno de seguridad», manifestó.
El embajador sueco, por su parte, calificó los avisos de Moscú de «inaceptables», pero señaló que a Estocolmo «no le interesan estos comentarios».
Los dos representantes diplomáticos recordaron que sus países no son neutrales, puesto que su pertenencia a la Unión Europea les impide permanecer al margen de lo que les ocurre al resto de Estados miembro. «No somos países neutrales, eso es muy importante, un país miembro de la UE no puede ser neutral porque forma parte de la familia de la UE», defendió Rautio, quien matizó que «otra cosa es estar alineado militarmente».
Tauriainen indicó que la posición de Estocolmo «ha cambiado» desde la entrada en la UE. «Nuestra posición ha evolucionado y hace 20 años hemos dejado la neutralidad (…) pero seguimos la política de no alineamiento», aseveró, remarcando que su propósito es «crear seguridad» con sus países vecinos y amigos.
Los dos embajadores se refirieron al aumento del gasto en defensa de Helsinki y Estocolmo y señalaron que cumplen con la contribución del 2 por ciento del PIB destinado a gasto militar, el compromiso exigido por la OTAN..
Sari Rautio señaló que Finlandia invierte el 1,7 por ciento de su PIB en defensa, pero con la decisión de diciembre de comprar más cazas se superará el límite del 2 por ciento. En cuanto a Teppo Tauriainen indicó que el Gobierno sueco ya ha anunciado su intención de alcanzar el 2 por ciento, puesto que actualmente se destina el 1,26 por ciento.