<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, ofreció ayer el liderazgo de España en la lucha contra la pandemia del COVID-19 en dos regiones prioritarias para la Cooperación Española, América Latina y el Caribe y el Sahel.</strong></h4> <strong>Albares participó ayer en una reunión ministerial convocada por el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, para analizar el Plan de Acción Global para la lucha contra el COVID-19</strong>. El encuentro, el segundo a nivel de ministros, contó con la presencia de sus homólogos de Alemania, Arabia Saudí, Canadá, Colombia, Corea, Francia, Indonesia, Italia, Japón y Senegal, así como de la comisaria de Asociaciones Internacionales de la Comisión Europea, Jutta Urpilainen, y representantes de la Unión Africana y de los Ministerios de Asuntos Exteriores de Australia, India, Reino Unido, y Sudáfrica. Durante las discusiones, los participantes abordaron seis líneas de actuación prioritarias correspondientes al Plan de Acción Global: aumentar la vacunación, reforzar la cadena de suministros, facilitar información precisa y veraz sobre las vacunas, apoyo a la seguridad y formación de los trabajadores sanitarios, refuerzo de la arquitectura global de la salud y otras actuaciones terapéuticas no vacunales. Durante su intervención, <strong>Albares informó de que España ha sido capaz de compaginar “un alto porcentaje de vacunación de su propia población” con el hecho de ser “uno de los principales donantes de vacunas”. </strong>El 90% de las donaciones españolas se han efectuado a través del mecanismo COVAX, lo que convierte a España en su quinto contribuyente, con más de 50 millones de dosis enviadas. <strong>España es, además, el segundo donante de vacunas en Latinoamérica y también ha distribuido dosis en África Subsahariana, Vecindad Sur y Asia</strong>. En la misma línea, prosiguió, se ha facilitado el acceso a la vacunación en contextos humanitarios, como en la reciente operación a favor de los refugiados afganos en Irán. No obstante, advirtió Albares, “no sólo es necesario incrementar la distribución de vacunas, sino también reforzar los sistemas nacionales de salud” y reformar el sistema de gobernanza global de la salud, reforzando también el liderazgo de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para prevenir futuras pandemias. Aparte, el titular de Exteriores ofreció <strong>el liderazgo de España en la coordinación de la respuesta de los donantes contra el COVID-19 en dos líneas de acción -la lucha contra la desinformación y el apoyo a los trabajadores sanitarios- y en dos regiones geográficas: América Latina y el Caribe y el Sahel</strong>. Se trata de dos regiones prioritarias para la Cooperación Española en las que España cuenta con una importante experiencia previa y un amplio despliegue institucional y trabaja en estrecha coordinación con el Equipo Europa, así como con las contrapartes locales. Para trabajar en estas dos áreas, España cuenta también con el programa global de salud COVID-19 recientemente lanzado por la Agencia Española de Cooperación Internacional al Desarrollo (AECID) en doce países prioritarios.