<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>El vicepresidente ejecutivo de la Fundación Alternativas, Diego López Garrido, advirtió la semana pasada, durante la reunión anual de los centros de pensamiento (<em>Think Tanks</em>) de todo el mundo, de que el G-7 debería impulsar la “vacunación masiva contra el COVID-19 en los cinco continentes, sin discriminación”. </strong></h4> “Mientras haya países con baja tasa de vacunación, ninguno estará a salvo de contagio ni de graves enfermedades”, afirmó López Garrido durante su intervención en el encuentro, <strong>celebrado los días 6 y 7 de diciembre en Manama, capital del reino de Baréin, y en el que la Fundación Alternativas representó al conjunto de los <em>Think Tanks</em> de Europa Occidental</strong>. Según López Garrido, “Europa occidental está bien protegida frente al virus, con entre el 60 y el 70% de su población vacunada por completo, mientras que América llega sólo al 37%, Asia al 27% y África al 7%”, según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Esa diferencia, advirtió, podría producir no solo un “aumento de la transmisión y las infecciones”, sino que la nueva variante sea más “agresiva”. Por ello, manifestó, <strong>el G7 (Grupo de los Siete, formado por los siete países más avanzados económicamente del mundo: Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y Reino Unido) debería adoptar medidas para lograr la “vacunación masiva contra el COVID-19 en los cinco continentes, sin discriminación</strong>”. “El COVID-19 es un problema global que requiere una completa cooperación internacional, basada en el multilateralismo y la solidaridad”, añadió el exdiputado y antiguo secretario de Estado para la UE entre 2008 y 2011. Según López Garrido, dos de los principales daños colaterales de la pandemia han sido el aumento de la vulnerabilidad de las mujeres durante los confinamientos, en los que se han disparado los casos de violencia de género, y el incremento de los casos de “enfermedades mentales”, como depresión o ansiedad. Aparte, <strong>el negacionismo ha creado un “espacio político aprovechado por los populismos y sus estrategias partidistas”, sobre todo en Europa central y del este</strong>, que ha llegado al otro lado del Atlántico, creándose un “poderoso movimiento que rechaza las recomendaciones sanitarias”. El vicepresidente ejecutivo de Alternativas advirtió también de que los políticos deben actuar cuanto antes ante la “nueva ola de contagios de la variante <em>Ómicron</em>”, una nueva mutación del virus descubierta en Suráfrica y que podría convertirse en “dominante”, por lo que “no hay tiempo que perder”. Asimismo, afirmó, los Gobiernos deben incrementar su inversión sanitaria en las investigaciones de las enfermedades mentales y el cáncer, que se han visto frenadas por la lucha contra el coronavirus. Respecto al papel de los <em>Think Tanks</em> en la lucha contra la pandemia, López Garrido destacó la necesidad de “<strong>trasladar a la población la recomendación de vacunarse, denunciar los mensajes de los grupos negacionistas y recordar que la vacunación no es sólo una decisión personal”</strong>. A su juicio, es muy importante “desmontar las teorías conspirativas y potenciar la cooperación a través de la ciencia y la tecnología”.