The Diplomat
El buque insignia de la Armada británica, el portaaviones Queen Elizabeth, llegará hoy a Palma de Mallorca en la etapa final de una misión que ha durado siete meses y en la que, junto con los otros ocho barcos que componen su grupo de combate, ha trabajado con alrededor de 40 países, entre ellos España, según informó ayer la Embajada del Reino Unido en Madrid.
Con sus 70 metros de altura y 280 metros de largo, el HMS Queen Elizabeth -uno de los dos buques de guerra más grandes construidos por la Royal Navy-, efectuará posteriormente otra parada en la base naval de Rota, a las que habrá que sumar dos paradas del destructor HMS Diamond en Alicante y Valencia, una parada del destructor HMS Defender en Barcelona y otra del buque cisterna RFA Tidesurge en Valencia, todas ellas en los próximos días.
“Estoy muy contento de tener al Grupo de Combate de la Armada británica de vuelta en los puertos españoles, después de su visita del pasado mes de junio”, declaró el embajador británico, Hugh Elliott. “España ha sido la primera y la última parada en este histórico primer despliegue del nuevo grupo de portaaviones del Reino Unido”, añadió.
El grupo de combate del portaaviones (CSG, por sus siglas en inglés) incluye algunos de los navíos más avanzados tecnológicamente en la historia naval británica. “El objetivo de su primer despliegue ha sido mostrar el compromiso del Reino Unido con un orden internacional abierto y seguro, así como su fiabilidad como actor internacional que se toma en serio su responsabilidad en la defensa y seguridad a nivel mundial”, indicó la Embajada.