<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, aseguró ayer ante el Congreso de los Diputados que los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2022 prevén un incremento de un 15,39% de la ayuda oficial al desarrollo, lo que permitirá recuperar “los niveles de hace una década” y consolidar la cooperación como </strong><strong>“</strong><strong>una verdadera política de Estado”.</strong></h4> “Se trata de unos presupuestos al servicio de la política exterior de España, una política de Estado, con la defensa de los españoles y sus valores e intereses como máxima prioridad”, afirmó el ministro durante su comparecencia ante <strong>el pleno de la Cámara Baja para defender las partidas presupuestarias de su Departamento contempladas en el proyecto de ley de PGE.</strong> Según Albares, <strong>el presupuesto consolidado para Exteriores asciende a 1.928,65 millones de euros, lo que representa un incremento total del 4,13 % respecto al ejercicio anterior</strong> y refleja una acción exterior cuyos principales objetivos son “el apoyo al multilateralismo, el cambio del modelo económico y social, la revolución digital, la emergencia climática y la solidaridad que acompaña a una recuperación justa, con un aumento de las partidas de cooperación y del Instituto Cervantes”. En lo que respecta al apoyo al multilateralismo, el ministro recordó que Madrid acogerá en junio de 2022 la cumbre de la OTAN y que España asumirá la Presidencia de la UE en el segundo semestre del próximo año, por lo que se destinarán 26,21 millones de euros para los “gastos preparatorios” de esta Presidencia. Asimismo, indicó, los PGE prevén 433,40 millones de euros para donaciones a organismos internacionales y otros 165,37 millones de euros para operaciones de paz en Líbano, Congo, Colombia o Mali. El ministro destacó también el incremento en un 15,39 por ciento de la partida destinada a la <strong>ayuda oficial al desarrollo</strong> (AOD), con un importe total de 3.506 millones de euros y un aumento del 28% del presupuesto de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID). Gracias a estos presupuestos, aseguró, la AOD “alcanzará los niveles de hace una década” y aumentará un 93,4% respecto a 2015, cuando la ayuda al desarrollo alcanzó sus niveles más bajos en los PGE. Este incremento, además, representará el 0,28% de la Renta Nacional Bruta (RNB), frente al 0,26% de2021, lo cual, aseguró, ayudará al objetivo del Gobierno de alcanzar el 0,5% de la RNB al final de legislatura y a consolidar la cooperación como “una verdadera política de Estado”. El proyecto de presupuestos también prevé una partida para la modernización e impulso del <strong>Instituto Cervantes y otra cantidad de 110 millones de euros para el Plan de Transformación Digital Consular, procedentes de los fondos del Plan de Recuperación, </strong>a fin de “modernizar los sistemas de información consular y las infraestructuras tecnológicas para dar mejor servicio a los españoles en el extranjero”, explicó. Asimismo, los PGE incluyen 495,53 millones para el área de Administración y Servicios Generales del Ministerio, 79 millones de los cuales se destinarán a los servicios comunes del Servicio Exterior y los 416 millones restantes a las Embajadas y Consulados. Aparte, los PGE destinarán 48 millones de euros para la mejora y modernización de la estructura y organización del Ministerio, la digitalización de sus servicios y el traslado a la nueva sede de la Plaza del Marqués de Salamanca, en Madrid. <h5><strong>Duras críticas del PP</strong></h5> Durante el debate, <strong>la portavoz del PP ante la Comisión de Cooperación Internacional, Paloma Gázquez</strong>, calificó este presupuesto de “entelequia” y expresó su temor de que la política de cooperación esté marcada por Bildu. “Y ya sabemos cómo sería, los fondos irían a gobiernos dictatoriales, Venezuela, Nicaragua, Cuba, Irán, y nunca a la población oprimida de esos países”, afirmó. Por ello, pidió al ministro que acepte las enmiendas planteadas por el PP “encaminadas a la implantación y la defensa de la democracia y los Derechos Humanos. Por su parte, <strong>la portavoz del PP ante la Comisión de Asuntos Exteriores, Valentina Martínez</strong>, reiteró su conocido argumento de que el Gobierno “ha llevado la imagen exterior al peor momento de nuestra historia democrática” y denunció España no tiene “ninguna credibilidad” y, por ello, está ausente “de los principales debates europeos”. Asimismo, acusó al expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero de “blanquear a las dictaduras más crueles” con el “silencio cómplice” del presidente del Gobierno y del ministro de Exteriores, y lamentó que el Gobierno haya recurrido al “ninguneo” y a la “censura” para negarse a negociar los presupuestos con el PP y, en cambio, sí haya acudido a partidos que “trabajan única y exclusivamente para destruir la imagen de España en el exterior”.
