The Diplomat
Un tribunal militar israelí condenó ayer a 13 meses de prisión y 14.000 euros de multa a la cooperante española Juana Ruiz, después de que esta aceptara un acuerdo con la Fiscalía del país, considerándose culpable de “prestar servicios a una organización ilegal”.
Ruiz fue arrestada el pasado 13 de abril y retenida durante casi un mes sin acusaciones formales. En total, lleva ya siete meses en la cárcel, por lo que solo tendrá que cumplir otros seis y pagar la mitad de la multa para poder salir de prisión.
Según el acuerdo, los cargos se redujeron de cinco a dos: «prestar servicios a una organización ilegal» así como «recibir dinero e introducirlo ilegalmente» en Cisjordania, por su trabajo como recaudadora de fondos en la ONG palestina para la que trabajaba, que Israel considera ilegal. Israel ha acusado a esta ONG -Comités de Trabajo para la Salud- de integrar una red que desviaba dinero europeo al Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP), considerado grupo terrorista también por Estados Unidos y la Unión Europea.
Durante la breve vista de ayer, la jueza militar israelí aclaró, como pidió la defensa, que su caso no está vinculado a las cinco ONG designadas como terroristas ni tenía conocimiento de que se desviaran los fondos al Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP), como dijo el Gobierno la semana pasada por la presentación del acuerdo.
La trabajadora humanitaria, de 63 años, reside en los territorios palestinos ocupados desde los años 80 e Israel le aplica la ley militar, como sucede con el resto de palestinos de Cisjordania.