The Diplomat
El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, asistió ayer, en el Palacio de Santa Cruz, a la toma de posesión del secretario general de la Unión Europea, Pascual Navarro, cargo recuperado para preparar la Presidencia española del Consejo de la UE del segundo semestre de 2023.
En el acto, tomaron posesión también cinco directores generales nombrados recientemente. Se trata del director general de Política Exterior y de Seguridad, Federico de Torres Muro; la directora general para África, Alicia Rico Pérez del Pulgar; la directora general de Diplomacia Económica, Ana Esmeralda Martínez Sáez; el director general de Integración y Coordinación de Asuntos Generales de la Unión Europea, Salvador Rueda Rabanal; y la directora general de Coordinación del Mercado Interior y otras Políticas Comunitarias, María Dolores Lledó Laredo.
Albares intervino para señalar que España tiene una doble alma -iberoamericana y europea- y que la recuperación de la Secretaría General de la UE, que ya existió hace diez años, trata de responder al desafío de potenciar Europa en un momento -dijo- en que nos enfrentamos al reto de la Presidencia “cuando hay que construir la Europa digital, la Europa verde, la Europa social, que necesitamos, como se ha puesto de manifiesto con el COVID”.
“Pero también -agregó, dirigiéndose al nuevo director general de Política Exterior y de Seguridad-, tenemos ante nosotros la Cumbre de la OTAN de 2022, en la que se va a adoptar un nuevo concepto estratégico y ahí está el desafío de nuestra seguridad en el futuro, la nuestra y la de nuestros aliados. Nuestro papel va a ser central y fundamental”.
Asimismo, aludió al viaje que realizó el jueves a Argelia, en el que participó la nueva directora general de Diplomacia Económica, subrayando que se logró el objetivo de garantizar el suministro de gas español y aseguró que el Ministerio continuará “defendiendo los intereses de las empresas españolas, sea cual sea su tamaño, porque detrás de ellos están los españolas y las españolas, el empleo de calidad”.
En cuanto a África Subsahariana, indicó que es una zona que está lejos en nuestras mentes, pero no nos damos cuenta de que son nuestros vecinos, y afirmó que hay que centrarse en la inmigración irregular, pero no sólo en ese aspecto, sino también en las potencialidades.
Finamente, abogó por no olvidar las relaciones bilaterales con los países que son miembros de la Unión Europea.