<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>Los ministros de Asuntos Exteriores y de Defensa, José Manuel Albares y Margarita Robles, participaron ayer en el acto de condecoración de los 23 empleados de la Embajada de España en Kabul cuya participación en las labores de evacuación permitió poner a salvo a más de 2.000 afganos tras la victoria militar de los talibanes.</strong></h4> <strong>“Representáis la entrega y generosidad de nuestro país”</strong>, afirmó Albares durante el acto, celebrado en la sede del Ministerio de Asuntos Exteriores en el Palacio de Viana de Madrid, y que comenzó con <strong>un homenaje al subinspector de la Policía Nacional Jorge García Tudela y al policía Gabino Sanmartín, que fallecieron en el atentado contra la Embajada de España en 2015, así como a todos los españoles que perdieron la vida durante los veinte años de presencia española en el país</strong>, los cuales, junto al personal de la legación española, “han dedicado todo su esfuerzo a construir un Afganistán mejor”, declaró el ministro. Según José Manuel Albares, desde el mismo momento en que “esto dejó de ser posible”, <strong>los empleados del Servicio Exterior se emplearon con “convicción y determinación” a la tarea de “poner al mayor número de personas posible a salvo y ofrecerles la oportunidad de un futuro cuando su mundo se derrumbaba alrededor”. </strong>Asimismo, Albares calificó de “ejemplar” la estrecha coordinación con el Ministerio de Interior, la Policía y el Ministerio de Defensa y destacó el esfuerzo de todo el Servicio Exterior, que escenifica <strong>“las mejores cualidades de nuestro país: solidaridad, generosidad y compromiso”.</strong> <strong> </strong> <strong>“No hemos olvidado a todos los que se han quedado en Afganistán”</strong>, aseguró el ministro. Por ello, aseguró, España continúa trabajando a todos niveles, con los países socios y con los países vecinos de Afganistán, para traer a los que han quedado en Afganistán y para garantizar que el nuevo régimen no pueda destruir los avances conseguidos. <strong>“Nuestra misión no ha terminado”</strong>, sentenció. En representación de todos los condecorados, <strong>el ex embajador de España en Afganistán, Gabriel Ferrán</strong> –quien recibió la Gran Cruz de la Orden del Mérito Civil-, destacó la importancia del Servicio Exterior en la Administración Pública y rindió un homenaje a todo el personal de la Embajada, del que destacó la motivación de cada uno de sus miembros. Aparte del embajador, <strong>también fueron condecorados Paula Sánchez</strong> (<strong>segunda Jefatura de la Embajada), Juan Duarte Cuadrado, Koussay Boulaich Ahmed, Antonio Guillén Hidalgo, Ahmad Baloch, Said Ahmad Wahdat Ahmadzada y Sayed Saber Sayeed, con la Encomienda de Número de la Orden del Mérito Civil; Isabel García Fernández-Llamares, con la Encomienda de la Orden Isabel la Católica; Susana Madarnás Piñeiro, con la Cruz de Oficial de la Orden de Isabel la Católica; Manuel González Garagorri, Jaime Moreno Bau y Francisco Javier Muñoz Treceño, con la Cruz de Oficial de la Orden del Mérito Civil; y Guillermo Samuel Begué Moratalla, Pablo Benítez Jiménez-Ugarte, Javier Carracedo Vicente, Cristina Conesa Sancho, Miguel Ángel de Diego Martín; Fernando Magallanes Mato, Teresa Hergueta Cholmeley, Eva María Jerez Vento, Carolina del Río Vílchez y Víctor Javier Torcal Sánchez, con la Cruz de la Orden del Mérito Civil.</strong>