Texto y fotos: Juan David Latorre.
Las Embajadas de Guatemala, El Salvador, Honduras, Nicaragua y Costa Rica celebraron ayer en la Casa de Vacas de los Jardines del Buen Retiro de Madrid el Bicentenario de la Independencia de las cinco Repúblicas Centroamericanas.
La embajadora de Guatemala, Mónica Bolaños, habló en representación de los cinco embajadores y destacó que “esta conmemoración simboliza la libertad que nuestros pueblos obtuvieron en 1821, año en el que iniciaron los procesos de transformación democrática que han permitido consolidarnos como Estados modernos, actores de nuestra propia historia y constructores de nuestros propios destinos, inscritos en el concierto de las naciones.”
“El futuro de Centroamérica, prosiguió, pese a las adversidades vividas, es promisorio. Cuenta con una posición geográfica envidiable, bañada por dos océanos, una población joven y talentosa, abundantes recursos naturales, bastas lecciones aprendidas y un amplio espacio para obtener grados de desarrollo humano y material, capaces de superar las grandes necesidades del pasado y del presente.”
La embajadora guatemalteca finalizó resaltando que “juegan en ese esfuerzo un papel central la provisión de servicios públicos de educación, salud y cohesión social, así como la capacidad que tienen nuestros líderes de promover políticas para la mitigación y adaptación al cambio climático, la atención de eventos extremos y el favorecimiento del empleo decente, un elemento esencial para la reducción de la desigualdad y la pobreza, en particular cuando beneficia el empoderamiento económico de las mujeres. Todo ello en un marco de democracia representativa y respeto al Estado de Derecho, acompañada de sistemas políticos transparentes y dispuestos a la rendición de cuentas. Centroamérica vive un momento histórico en su existencia y nos orgullecemos de conmemorarlo en España, país hermano con el que nos unen fuertes lazos de amistad, admiración, solidaridad y respeto, resultado de los valores, anhelos y aspiraciones que compartimos. Con el que nos une una lengua dominante y con el que intercambiamos tradiciones y costumbres.”
José Luis Martínez-Almeida, alcalde de Madrid, tomó la palabra para felicitar a los países convocantes y se enorgulleció de estar rodeado de “los mejores embajadores de Madrid en sus países”, refiriéndose a los embajadores centroamericanos presentes. Asimismo, declaró que “Madrid se siente la capital en Europa de cada una de las repúblicas centroamericanas porque somos pueblos hermanos.” El alcalde madrileño destacó la forma “ejemplar y pacífica” de declarar la independencia de estos países, que “no supuso un punto de ruptura en sus relaciones de hermandad con España, sino un punto y seguido”, motivo por el que, dos siglos después, “seguimos manteniendo esos lazos culturales, afectivos y sociales tan estrechos que nos permiten seguir diciendo que somos pueblos hermanos.”
Por último, se dirigió a los asistentes Pilar Cancela, secretaria de Estado de Cooperación Internacional (SECI), que indicó: “Esta efeméride nos recuerda los fuertes vínculos que existen entre nuestros países y las oportunidades que nos ofrece este presente y este futuro que compartimos y que compartiremos.”
Refiriéndose a la actual pandemia de Covid que sufrimos, la secretaria de Estado declaró que: “una cosa nos ha enseñado, y es que no podemos resolver las cosas solos. No podemos salir solos de estos grandes retos y de estas situaciones de crisis económica, social y sanitaria. Estos retos globales nos demuestran que, o salimos juntos y juntas o no saldremos. Por tanto, el espacio cultural iberoamericano es una realidad que constituye un elemento de unión muy fuerte entre países hermanos que somos.”
Por último, Pilar Cancela resaltó los valores de todas las repúblicas centroamericanas y de España para configurar sociedades estables, cohesionadas, inclusivas. Los ideales de la Ilustración, que no han pasado de moda, que están más vigentes que nunca, como la libertad, la democracia, la tolerancia, el respeto a los Derechos Humanos, la igualdad de género, la separación de poderes, la lucha contra la violencia de género, la solidaridad, la justicia y la cohesión social, son ese legado compartido que constituye el vínculo sobre el que se asienta nuestro hermanamiento.”