The Diplomat
La Reina Letizia y la vicepresidenta y canciller de Colombia, Marta Lucía Ramírez, participaron ayer en la inauguración de la 80 edición de la Feria del Libro de Madrid, en la que Colombia será la protagonista bajo el lema Colombia Diversa y Vital, todo ello en medio de la polémica generada en el país sudamericano por el supuesto sesgo político del Gobierno de Bogotá a la hora de seleccionar o descartar a los autores invitados.
Colombia participa este año como País Invitado de Honor, razón por la cual ha desplegado un pabellón en la Feria, en el que se detuvo durante unos minutos la Reina para conocer de primera mano la propuesta del país sudamericano y conversar brevemente con algunos de los representantes colombianos. “Durante 17 días, en el Parque El Retiro, los visitantes podrán disfrutar de la gran diversidad de nuestra tierra. Escritores, cineastas, académicos e ilustradores, entre otros, estarán compartiendo sus ideas en torno a la pluralidad de una Colombia vibrante, una Colombia diversa y vital, como bien lo señala el lema que hemos escogido para participar en la feria”, declaró el embajador de Colombia en España, Luis Guillermo Plata.
La elección de Colombia como “invitado de honor” de la Feria permitirá mostrar “el progreso de una nación que desde el 2019 conmemora 200 años de historia”, según los organizadores. Por ese motivo, Colombia desarrollará durante el evento más de 40 actividades para mostrar la diversidad cultural del país, como una amplia oferta literaria, conferencias de destacados autores colombianos, manifestaciones culturales de artes visuales, cine y audiovisuales, gastronomía y música, además de actividades dirigidas especialmente al público infantil.
La elección de los 37 autores invitados al evento ha generado una gran polémica en Colombia por la ausencia de algunos escritores, una ausencia que muchos literatos del país, incluidos algunos de los escogidos, han interpretado como una censura a causa de sus posiciones críticas con el Gobierno del presidente Iván Duque, quien la próxima semana efectuará una visita oficial a Madrid. Entre los ausentes destacan figuras literarias como Piedad Bonnett, Laura Restrepo, William Ospina, Héctor Abad Faciolince o Fernando Vallejo.
La polémica se ha visto agravada por unas declaraciones del embajador Luis Guillermo Plata en las que afirmó que el Gobierno había decidido invitar a autores “neutrales”, unas palabras que contribuyeron a avivar aún más la polémica porque fueron interpretadas como una confirmación de que Duque había vetado a los autores que se habían mostrado más críticos con él, especialmente tras las fuertes protestas que vivió el país y que fueron duramente reprimidas por la Policía. Curiosamente, entre los primeros autores que reaccionaron contra las declaraciones del embajador figuraron dos autoras invitadas por el Gobierno, Melba Escobar y Margarita García Robayo, que se han negado a participar en la Feria. Tras la polémica, el embajador emitió un comunicado en el que reconoció que se había equivocado: “Me equivoqué. Desafortunadamente el modo que empleé mis palabras distorsionó el sentido de lo que quería expresar”.
Por su parte, el Ministerio colombiano de Relaciones Exteriores aseguró, para justificar las invitaciones, que se había buscado “una muestra de la amplia diversidad regional, cultural, de género, generacional y literaria” y que se habían tenido en cuenta criterios como “diversidad regional, diversidad generacional, participación igualitaria de hombres y mujeres, representación de diversos géneros literarios, diversidad de públicos al que son dirigidas las obras e incorporación de nuevas y valiosas voces que aún no habían tenido la oportunidad de estar en eventos de tan alto nivel, entre otros”.