<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, viajó ayer por sorpresa a Pakistán con el objetivo de “seguir in situ la evolución de la crisis de Afganistán y abordar con los protagonistas la búsqueda de soluciones”, según informó el Ministerio.</strong></h4> El motivo de esta visita, la primera de un ministro de Asuntos Exteriores español desde el establecimiento de las relaciones diplomáticas hace más de 70 años, es “demostrar en la práctica y sobre el terreno los esfuerzos para lograr el objetivo de no dejar a nadie atrás”, prosiguió el Departamento en una nota de prensa. Albares se reunió en Islamabad con <strong>su homólogo paquistaní, Shah Mehmood Qureshi</strong>, con quien ofreció una rueda de prensa conjunta en la que anunció que <strong>España se comprometerá este lunes, durante la Conferencia de Donantes sobre Afganistán (en la que participará él mismo por videoconferencia), a aportar fondos para afrontar la crisis humanitaria en Afganistán</strong>. La contribución española, cuya cantidad no precisó, responde a los 510 millones de euros solicitados por Naciones Unidas a la comunidad internacional para poder atender a las necesidades en Afganistán durante los próximos cuatro meses. “España asistirá y comprometeremos fondos, haremos promesas”, declaró Albares en referencia a la Conferencia, convocada por el secretario general de la ONU, Antonio Guterres. Asimismo, aseguró, la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID) “está dispuesta para ayudar a los afganos”. Casi 20 millones de afganos dependen en la actualidad de la ayuda externa para sobrevivir. Aparte, la reanudación de los combates que han concluido con la victoria militar de los talibanes en Kabul ha generado más de 570.000 desplazados internos, una cantidad que podría elevarse a 750.000 este mismo año. Durante su estancia en Pakistán, adonde viajó acompañado por <strong>la secretaria de Estado de Asuntos Exteriores y Globales, Ángeles Moreno Bau</strong>, Albares también fue recibido por <strong>el jefe del Estado Mayor de la Defensa, general Qamar Javed Bajwa, y por el primer ministro, Imran Khan</strong>, con quienes abordó la posibilidad de abrir nuevas vías de colaboración para la evacuación de los afganos que han colaborado con España en los últimos años y que aún se encuentran en el interior de Afganistán, y a quienes solicitó que los colaboradores españoles que crucen la frontera sean atendidos lo antes posible por la Embajada de España en Pakistán a fin de reducir la presión migratoria sobre Pakistán. Según Albares, España y Pakistán desean “lo mismo” para Afganistán, “estabilidad, paz, que la crisis no se desborde a la región y que la ayuda humanitaria llegue a los afganos”. Asimismo, el ministro expresó su esperanza en que los colaboradores afganos que no pudieron ser evacuados antes del 27 de agosto “puedan abandonar pacíficamente el país, si así lo desean, y venir a España”, y advirtió de que tanto para España como para la UE y la comunidad internacional es fundamental que en Afganistán se respeten los derechos humanos “en el futuro próximo”. Aparte, Albares expresó su deseo de que su visita a Islamabad contribuya a relanzar las relaciones bilaterales con Pakistán, “un socio importante para España y la UE” y que cuenta en nuestro país con una colonia de alrededor de 100.000 personas. En este sentido, anunció que su objetivo <strong>es recuperar las consultas bilaterales antes de que concluya este año, “a ser posible en Madrid”</strong>. Las últimas consultas bilaterales se celebraron en 2018. Tras la rueda de prensa, Albares visitó la Embajada de España, donde se reunió con el personal, y mantuvo un encuentro con una familia afgana que próximamente se trasladará a España.