The Diplomat
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el jefe del Ejecutivo de Ceuta, Juan Jesús Vivas, pactaron ayer fortalecer y activar «todos los recursos que sean necesarios» para lograr el objetivo de retornar a los menores a Marruecos «en el menor tiempo posible» y atendiendo a los reparos de la justicia por usar el acuerdo firmado con Rabat en 2007.
En rueda de prensa tras la reunión mantenida por ambos en Moncloa, el presidente de la ciudad autónoma explicó que entienden que no es posible aplicar el acuerdo de 2007 y que el marco jurídico válido es la ley de extranjería y la elaboración de expedientes individualizados, como pedían Fiscalía y ONG.
Vivas afirmó que la solución se buscará «de acuerdo con la interpretación de las leyes que hacen los jueces» y contando con Marruecos. Por ello, valoró que el Gobierno central se comprometa a «fortalecer cuantos recursos sean necesarios» para poner «todas las capacidades».
No obstante, precisó que entre las posibles soluciones no se baraja llevar a cabo traslado de menores a la Península, porque la prioridad es que los menores vuelvan a Marruecos
El presidente ceutí agradeció la colaboración de Sánchez, que lo citó ayer para mantener ese encuentro, tras el fallo judicial que mantenía el rechazo al retorno defendido tanto por el Gobierno de la ciudad autónoma como por el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, con quien «no ve motivos para polemizar». También rechazó que haya contradicciones en el PP, ya que todos -dijo- ven en esto una «cuestión de Estado».
Vivas señaló que acatarán la resolución judicial que suspende el retorno en el marco del acuerdo de 2007 firmado con Rabat, reconociendo que fue Ceuta quien instó a su aplicación a la Delegación del Gobierno ante una situación que califica de «insostenible» desde la entrada de 12.000 personas en mayo, de ahí que se requiera de «soluciones inaplazables».