The Diplomat
Los archivos del PSOE desclasificados hace algunos años -y a los que ha tenido acceso The Diplomat– guardan un cuestionario que la Comisión de Asuntos Exteriores del Parlamento británico envió en 1981 al entonces secretario general del PSOE, Felipe González, preguntándole si su partido estaría dispuesto a conceder un «estatuto de autonomía» a Gibraltar en el caso de una eventual devolución de la colonia a España.
La Cámara de los Comunes creó ese año una subcomisión parlamentaria sobre el Peñón -llamada ‘La situación de Gibraltar y las relaciones del Reino Unido con España’- a raiz del acuerdo de Lisboa de agosto de 1980 en el que Londres y Madrid se comprometieron a resolver el problema de la Roca «en un espíritu de amistad» y de acuerdo con las resoluciones pertinentes de la ONU.
El cuestionario contiene 24 preguntas y fue enviado a González el 9 de marzo de 1981, apenas quince días después del intento de golpe de Estado del 23-F. Curiosamente, los diputados británicos preguntan al líder del PSOE por la posibilidad de que la colonia «se llene» de españoles cuando España entre en las Comunidades Económicas Europeas (CEE) y éstos se equiparen en derechos a los llanitos, que llevaban dentro de la UE desde 1973. Por aquel entonces, con la Verja aún cerrada, había censados 300 españoles en la Roca.
A continuación se entra de lleno en una posible devolución del Peñón a España. «Su partido ¿estaría dispuesto a ofrecer a los gibraltareños un estatuto de autonomía? Si lo está, ¿cuál sería su alcance en líneas generales?», se indica en la pregunta 15. También se constata la «mala fama» que tienene las Fuerzas de Orden Público españolas en la colonia, así que se inquiere a González si el PSOE aceptaría «un cuerpo civil que no porta armas de fuego», en referencia a los bobbies ingleses, en un hipotético Gibraltar español.
«Si la soberanía sobre Gibraltar fuese devuelta a España, ¿toleraría su partido la permanencia de la base? Y en ese caso, ¿en qué condiciones?», prosiguen los parlamentarios británicos, quienes advierten que en aquella época el 30% de la población activa del Peñón era empleada por el Ministerio de Defensa y que un 50% del PIB gibraltareño provenía «directa o directamente» del erario británico, es decir de la metrópoli.
En todo caso, la Cámara de los Comunes deja para el final la posibilidad de que Londres no se avenga a un eventual retorno del territorio a manos españolas. «Su partido, ¿aprobaría negociaciones en las que la consideración decisiva, y el objetivo final, no fuesen la devolución a España de la soberanía sobre el territorio?», preguntan a González.
La última pregunta versa sobre el régimen de Franco. «En el curso de sus contactos con políticos británicos anteriores a la muerte de Franco, ¿se le dio a entender acaso que una vez establecida la democracia en España, la transferencia de la soberanía no sería problema?». El archivo del PSOE no contiene la respuesta del entonces secretario general socialista al cuestionario de los parlamentarios británicos y si realmente la hubo.