The Diplomat
El Ministerio de Defensa descarta modificar su estrategia en relación con las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla tras conocer el rearme que está llevando a cabo Marruecos con la compra de material militar a Turquía, informa Europa Press. El Ejecutivo recuerda que España no está sola y que su política de Defensa se incardina en la UE y la OTAN.
Rabat negocia con Turquía, según se publicó recientemente, la compra de 22 helicópteros de ataque por valor de 1.300 millones de euros, así como de 12 drones para vigilar las fronteras de Ceuta y Melilla. Con anterioridad, un informe titulado ‘Marruecos, el Estrecho de Gibraltar y la amenaza militar sobre España’ del Instituto de Seguridad y Cultura avisaba del ambicioso programa armamentístico que está llevando a cabo Marruecos en los últimos años, que incluye la adquisición de material militar por más de 20.000 millones de dólares.
Sin embargo, la ministra de Defensa, Margarita Robles considera esta cuestión un «asunto interno de Marruecos». Al ser preguntada por Europa Press si prevé cambiar la estrategia de Defensa en Ceuta y Melilla ante el rearme que está llevando a cabo Marruecos, asegura que le merece el máximo respeto el país vecino. Eso sí, precisa que de lo que no cabe duda es de la españolidad de Ceuta y Melilla, de las que asegura que son tan españolas como cualquier otra ciudad de España. «Yo me siento muy ceutí y melillense», exclama.
En cualquier caso, Robles insiste en que la política de Defensa española se incardina en el ámbito de la Unión Europea y de la OTAN y cumple misiones con cascos azules y Naciones Unidas, myentras que «Marruecos no pertenece ni a la UE, ni a la OTAN».
España, recalca la ministra de Defensa, «no es un país que esté solo en políticas de defensa, es un país que contribuye a las políticas de defensa y en el marco de la UE y OTAN».
La ministra también se refiere a la Cumbre de la OTAN en la que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, tuvo un breve encuentro con el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y dice que, aunque las cámaras solo grabaron 29 segundos, ella fue «testigo presencial» del conjunto del encuentro y de la reunión de la Alianza Atlántica que duró varias horas.
En su opinión, en España a veces se peca de la falta de «generosidad» para reconocer lo positivo y no se pone en valor cuestiones importantes como el hecho de que el próximo año se celebrará en España la Cumbre de la OTAN. Una cuestión que es, asegura, un «reconocimiento de todos los países» del papel que ha realizado España en la Alianza Atlántica durante 40 años.
En este sentido, señala que «lo mejor de la cumbre son hechos y no palabras» ya que, insiste, «todos los países sin excepción celebraron y acogieron positivamente» el que se celebre la próxima cumbre en Madrid.
Es, añade, el reconocimiento de que España es un país serio y fiable internacionalmente y con una «proyección importante». Además, añade que hace unos días estuvo visitando un buque de la Armada en Rota con el secretario de Defensa americano y recalca que las «relaciones son magníficas».