<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>La Junta Directiva de la Asociación de Diplomáticos Españoles (ADE) salió ayer en defensa de Camilo Villarino en su actuación como director de Gabinete de la ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, en el caso del líder del Frente Polisario, Brahim Ghali.</strong></h4> En un comunicado, la ADE se refiere a las informaciones aparecidas en diversos medios de comunicación en relación con el proceso que se sigue en el Juzgado de Instrucción número 7 de Zaragoza contra Ghali por falsedad en documento privado, y, en concreto, de la solicitud presentada por la acusación particular al Juez para que se impute al diplomático Camilo Villarino Marzo por los delitos de prevaricación, encubrimiento personal y malversación de caudales públicos, <strong>por haber autorizado la entrada del líder del Polisario en nuestro país sin necesidad de pasar por un control de pasaportes.</strong> Según esas informaciones, en un <strong>oficio remitido a mediados de julio por el propio Villarino al juez,</strong> el jefe de gabinete de la entonces ministra de Asuntos Exteriores telefoneó el pasado 18 de abril al general segundo jefe del Estado Mayor del Aire, Francisco Javier Fernández Sánchez, para advertirle de que un avión procedente de Argelia se disponía a aterrizar en Zaragoza con Ghali en su interior. En su conversación con Villarino, el militar preguntó a la <em style="font-weight: inherit;">mano derecha</em> de González Laya si era necesario que Ghali se sometiera a los “trámite de aduanas o inmigración”. “Quien suscribe le contestó que no era preciso, siendo esta respuesta perfectamente coherente tanto con la práctica establecida como con la legislación vigente aplicable”, aseguró en su oficio al juez. <strong style="font-style: inherit;">“La persona que se comunicó por vía telefónica con el Estado Mayor del Aire el día 18 de abril fue quien suscribe, Camilo Villarino Marzo, director del Gabinete de la ministra”</strong>, prosigue el oficio. El comunicado de la ADE se señala que, a la luz de la información conocida,<strong> Villarino “actuó en el marco de sus funciones, de acuerdo con las instrucciones recibidas y los procedimientos establecidos”. </strong> “La ADE, además de tener la certeza de que el Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación y la Abogacía del Estado llevarán a cabo una defensa firme en el plano judicial de la <strong>integridad profesional de nuestro compañero y de su honorabilidad</strong>, quiere asimismo destacar su <strong>meritoria y dedicada trayectoria como funcionario diplomático</strong> que le ha hecho acreedor de una impecable reputación”, termina el comunicado. Camilo Villarino, que cesó en su cargo de director de Gabinete de la ministra González Laya, tras ser relevada esta por José Manuel Albares, el pasado día 10,<strong> se encuentra a la espera de que el Gobierno ruso conceda el plácet para nombrarlo embajador en Moscú</strong>. En medios diplomáticos se especula con la posibilidad de que, si Villarino fuera imputado, podría peligrar su nombramiento para hacerse cargo de la Embajada de España en Rusia. <strong>Querella archivada</strong> Mientras, ayer se conoció que <strong>el juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz, ha archivado una de las dos querellas presentadas contra Brahim Ghali, por un delito de genocidio</strong> al considerar que no se ha acreditado la comisión del tipo penal y que, en todo caso, los hechos están prescritos. En la querella interpuesta por la Asociación Saharaui para la Defensa de los Derechos Humanos, el magistrado estima que los hechos, presuntamente cometidos contra ciudadanos marroquíes entre 1975 y 1990, estarían prescritos, que <strong>no se ha acreditado la comisión del delito de genocidio</strong>, y que los testimonios de los testigos contradicen las afirmaciones de la querella. Ghali llegó a prestar declaración por videoconferencia ante el juez tras varios días hospitalizado por covid-19 en España. Tras su comparecencia, en la que el magistrado rechazó enviarle a prisión o retirarle el pasaporte, como pedían las acusaciones, Ghali salió de España rumbo Argel el 2 de julio.