<h6><strong>Eduardo González </strong></h6> <h4><strong>El director general de Política Exterior y de Seguridad del Ministerio de Asuntos Exteriores, Fidel Sendagorta, instó ayer a evitar la “indeseable visión en blanco y negro sobre una nueva guerra fría” entre Pekín y Washngton y advirtió de que Europa no puede “tener como única agenda con China los derechos humanos” y necesita buscar “una agenda positiva” con el gigante asiático en asuntos de interés compartido.</strong></h4> “China ha pasado de imperio cerrado en sí mismo y en su vecindad, y cuya influencia no alcanzaba a Europa, a potencia global cuya influencia llega a todas partes y mantiene roces con Europa en áreas de interés para España, como América Latina y África”, declaró Sendagorta durante la presentación por videoconferencia del informe <a href="http://www.realinstitutoelcano.org/wps/portal/rielcano_es/contenido?WCM_GLOBAL_CONTEXT=/elcano/elcano_es/zonas_es/policy-paper-espana-ante-rivalidad-estrategica-entre-china-y-estados-unidos" target="_blank" rel="noopener noreferrer"><strong><em>España ante la rivalidad estratégica entre China y Estados Unidos</em></strong></a>, elaborado por el <strong>Real Instituto Elcano</strong>. El acto fue presentado y moderado por <strong>José Juan Ruiz</strong>, presidente del Think Tank. En estas circunstancias, prosiguió, “vamos hacia una política mucho más compleja con China que responde a múltiples factores” y, por ello, <strong>“la visión en blanco y negro sobre una nueva guerra fría es indeseable”</strong>. Tanto para España como para el conjunto de Europa es necesario “aceptar la complejidad como nuevo marco de relación con China” y buscar <strong>“una agenda positiva con China”</strong> basada en “la cooperación en temas como el cambio climático, la no proliferación o algún conflicto regional”, advirtió Sendagorta. A juicio del director general, Europa debe seguir insistiendo en la defensa de sus propios valores en sus relaciones con China, especialmente en lo que respecta a los derechos humanos, que “forman parte de la identidad común de los países y de la Unión y no podemos dejarlos de lado”, como quedó demostrado con el régimen de sanciones aprobado recientemente por la UE por violaciones de derechos humanos en Xinjiang. No obstante, advirtió, <strong>“no podemos tener como única agenda con China los derechos humanos”</strong>. “Si queremos crear espacios de cooperación para, por ejemplo, reforzar la Organización Mundial del Comercio u otras instituciones importantes, tendremos que trabajar con países afines y con países no afines y crear espacios de entendimiento más allá de estos valores en los que nunca nos vamos a encontrar”, agregó. Asimismo, prosiguió, las relaciones de España con China, aunque deben ajustarse inevitablemente al doble marco de referencia trasatlántico y europeo, también cuentan con un importante “margen bilateral” en cuestiones como las inversiones bilaterales, la presencia inversora en América Latina o los ámbitos del conocimiento y la conectividad e incluso de la tecnología, en el cual España debe actuar dentro de la UE pero “no acríticamente, mirando más allá de los intereses de Francia y Alemania”. <h5><strong>Elena Pisonero y Mario Esteban</strong></h5> En el mismo acto, <strong>Elena Pisonero</strong>, presidenta de Taldig, fundadora de Relathia y ex secretaria de Estado de Economía, Energía y de la Pequeña y Mediana Empresa, advirtió de que “en este escenario de rivalidad entre EEUU y China, a la UE le van a pedir crecientemente que se posicione” y para ello es preferible “una Europa más fuerte que seleccione los ámbitos en los que realmente puede tener una posición más fuerte frente al G-2 (China y EEUU), como América Latina”. ”No es algo que podamos dejar para después, está en nosotros convertir esa amenaza en oportunidad, pero no lo vamos a poder hacer solos los gobiernos o las empresas, debemos mantener la colaboración para tomar decisiones, porque no siempre vamos a poder elegir lo que nos güiste”, prosiguió. <strong>“China antes estaba encerrada en sí misma y Europa no puede caer en ese error, porque el mundo actual es menos estable y más peligroso”</strong>, añadió. El autor del informe, <strong>Mario Esteban</strong>, investigador principal del Real Instituto Elcano, lamentó que España, “como país”, todavía no ha tomado conciencia “de la relevancia y urgencia de esta rivalidad entre EEUU y China”, que es “el gran evento geoestratégico de nuestro tiempo” y que “afecta al orden internacional vigente” y conduce a “la erosión del multilateralismo y de las capacidades de la comunidad internacional para hacer frente a los retos comunes”. Frente a esta “bipolarización”, afirmó el investigador, la UE debe mantener una posición cohesionada entre sus Estados miembros y, aunque “no debe haber equidistancia, porque en valores estamos mucho más cerca de Estados Unidos que de China y las previsiones son que va a seguir así, hay que evitar las dinámicas frentistas y buscar cierta flexibilidad” con Pekín. “El marco de refuerzo tiene que ser europeo, pero también asumiendo el marco nacional”, explicó. <strong>“España se inserta en la respuesta europea, pero también figura entre los países más reacios a la confrontación en materia de seguridad con China”</strong>, a diferencia de Francia, que “está más cerca de Estados Unidos”, agregó.