The Diplomat
España propuso ayer la creación de un nuevo fondo fiduciario del Fondo Monetario Internacional (FMI) que actúe en las economías de renta media, en los que la desigualdad y las bolsas de pobreza se han agravado por la crisis de la COVID-19.
Así lo hizo, en una reunión informal de los ministros de Desarrollo de la Unión Europea, donde España respaldó la cooperación europea con los países de renta media y el desarrollo humano en el escenario post COVID-19. En este contexto, también apoyó la incorporación de estas naciones en las iniciativas de moratoria y alivio de deuda, con especial atención en América Latina, una de las regiones más afectadas por la pandemia.
En la cita, en la que participó por videoconferencia, la secretaria de Estado de Cooperación Internacional, Ángeles Moreno Bau, en representación de la ministra de Exteriores, Unión Europea y Cooperación, Arancha González Laya, subrayó que esos países “son aliados clave para la consecución de la Agenda 2030, el multilateralismo y el Acuerdo de París”, según un comunicado difundido por el Ministerio de Exteriores.
En cuanto al desarrollo humano, la secretaria de Estado insistió en la “urgencia” de promover la lucha contra el hambre y la malnutrición, que han sufrido importantes retrocesos como consecuencia de la pandemia, y de atender vectores clave como la salud y la educación.
En la reunión se ha incidido especialmente en la necesidad de apoyar el sector de la educación, un ámbito prioritario del nuevo instrumento de financiación de la Unión Europea.
Por último, Moreno Bau remarcó el “papel crucial” que juegan los sistemas agroalimentarios para la conservación de la biodiversidad, los suelos, el agua y para la lucha contra el cambio climático y la pobreza rural. En este sentido, anunció la candidatura de España para presidir el Comité de Seguridad Alimentaria de Naciones Unidas para 2022-2023.