<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>Los representantes permanentes de los 27 Estados miembros de la UE aprobaron ayer una propuesta de la Comisión Europea para reabrir las fronteras exteriores de la Unión a los viajeros de terceros países que se hayan inmunizado contra el COVID-19 con las vacunas aprobadas por la Agencia Europea del Medicamento (EMA) o por la Organización Mundial de la Salud (OMS).</strong></h4> La decisión de los embajadores, que probablemente será formalizada hoy por el Consejo de ministros de Comercio, establece que podrán entrar en la UE los turistas que haya recibido <strong>las dosis completas en los países extracomunitarios en los que se aplican las vacunas aprobadas por la EMA (BioNTech/Pfizer, Moderna, AstraZeneca y Janssen), como es el caso de Estados Unidos o Reino Unido, o por la OMS (la vacuna china Sinopharm).</strong> Con esta medida, los representantes de los Estados dan luz verde a una propuesta presentada el pasado 5 de mayo por la Comisión Europea para reactivar la economía y el turismo de cara a este próximo verano. En virtud de esa propuesta, podrán entrar en la UE los viajeros de terceros países que hayan recibido la pauta completa de vacunación al menos catorce días antes del inicio de su viaje. En todo caso, la apertura de las fronteras exteriores sólo se aplicará en los Estados miembros de la UE que ya estén teniendo en cuenta las vacunaciones como condición para levantar las cuarentenas o que exijan las pruebas de PCR al resto de socios europeos. El objetivo de esta cláusula es evitar que se dé un trato privilegiado a los ciudadanos de terceros países en detrimento de los propios ciudadanos de la UE. La decisión permitirá relajar las actuales restricciones a los viajes no esenciales desde más allá de las fronteras exteriores de la UE y favorecerá <strong>los intereses de los países más dependientes del turismo, como España, Portugal, Italia o Grecia</strong>. Asimismo, coincide con las negociaciones que actualmente llevan a cabo el Consejo y el Parlamento Europeo para sacar adelante el certificado verde digital, una iniciativa del primer ministro griego, Kyriakos Mitsotakis -y apoyada por España y otros países-, que podría entrar en vigor el próximo 1 de junio. En estos momentos, la UE cuenta con una lista de apenas una decena de países a los que se permite entrar por razones no esenciales: <strong>Australia, Nueva Zelanda, Ruanda, Singapur, Corea del sur, Tailandia y China</strong>, ésta última a expensas de que Pekín cumpla el principio de reciprocidad (algo que no está haciendo). Aparte, el pasado 5 de mayo se incorporó a <strong>Israel.</strong> En todos estos países, la tasa de incidencia acumulada de contagios es de 25 casos por cada 100.000 habitantes en los últimos catorce días. Precisamente, los Estados miembros también han revisado al alza la tasa de incidencia mínima del virus que se exigirá para aceptar la entrada en la UE, que pasa de 25 a 75 casos por cada 100.000 habitantes. La decisión de los embajadores establece unos criterios comunes para todos los Estados de la UE, pero también establece que los Gobiernos (a quienes compete en exclusiva la gestión de sus propias fronteras) tendrán capacidad para impedir la entrada o para aplicar otras restricciones desde países terceros en el caso de que aumenten los contagios o se detecten nuevas variantes.