<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>El director del Instituto Cervantes. Luis García Montero, concluyó ayer su visita de trabajo al Líbano, en el curso de la cual visitó el centro de la institución en Beirut, tras las graves dificultadas causadas por la pandemia y la explosión del pasado verano. Asimismo, anunció la apertura de una nueva extensión en Baalbek que permitirá abarcar la totalidad del territorio del Líbano y conoció de primera mano la labor que realiza el contingente español de la ONU en la enseñanza del idioma español.</strong></h4> García Montero llegó a Beirut el pasado lunes con el objetivo de apoyar el trabajo cultural y docente que realiza el <strong>centro del Instituto Cervantes en la capital</strong>, que sufrió graves destrozos a causa de la devastadora explosión que sacudió la ciudad el pasado 4 de agosto. Se trata del <strong>segundo viaje que realiza un director del Cervantes a Líbano, tras el efectuado en noviembre de 2010 por Carmen Caffarel.</strong> En declaraciones a los periodistas, el director del Instituto Cervantes aseguró que el centro -que ha cumplido 30 años de trayectoria, los mismos que el propio Instituto Cervantes- “ya está a pleno rendimiento” y reiteró su “compromiso de futuro” con el Líbano, un país en el que se ha incrementado significativamente el interés por la lengua española y la demanda de su enseñanza en estas tres décadas. García Montero -quien viajó acompañado por la secretaria general del Instituto, Carmen Noguero, entre otros responsables del Cervantes- se trasladó el martes a <strong>Baalbek</strong>, una localidad de 25.000 habitantes situada en el Valle de la Bekaa (a unos 30 kilómetros de la capital), donde anunció la apertura de una nueva extensión, formada por un par de aulas, para impartir clases de español. Con la nueva extensión en Baalbek, en la que colaborarán la Embajada de España y la Universidad Libanesa, el Cervantes cubrirá las distintas zonas geográficas del Líbano: Beirut, Kaslik (con una extensión), Trípoli (un aulario), Marjayoun (donde ayuda a los militares españoles de la base <em>Miguel de Cervantes </em>a enseñar español a la población civil y a personal de la ONU) y la citada Baalbek. García Montero estuvo acompañado por <strong>el embajador de España, José María Ferré de la Peña.</strong> El miércoles, García Montero y Ferré de la Peña visitaron en Beirut las obras de construcción de <strong>un colegio financiado por la AECID</strong> y que acogerá a 600 estudiantes de 12 a 17 años de edad, además de diez 10 aulas y otras instalaciones, como laboratorios o sala de informática. El objetivo de esta edificación modular prefabricada es ayudar a la recuperación de la capital libanesa tras la explosión del 4 de agosto, que destruyó completamente diez centros educativos y dañó 120 escuelas, ocho universidades y otros 20 centros formativos. El periplo de García Montero en Líbano concluyó ayer con una visita <strong>a la base militar <em>Miguel de Cervantes </em>en Marjayoun, integrada en la Fuerza Internacional de las Naciones Unidas para el Líbano (FINUL)</strong> <strong>y en al que los militares enseñan español desde 2007 a ciudadanos libaneses.</strong> Para ello, los oficiales y suboficiales voluntarios reciben el apoyo del Instituto Cervantes, dado que el 60% de ellos carecen de experiencia docente previa. Casi 600 militares formados por el Instituto han enseñado español y los valores y costumbres de la cultura español a unos 6.000 alumnos libaneses de más de 20 localidades libanesas. Durante el encuentro, el general de brigada José Antonio Miragaya, jefe del Sector Este de FINUL, explicó a García Montero que el programa lingüístico “es importante, no solo por enseñar español, sino porque permite tener interacción con la población local”. “Es emocionante ver los frutos prácticos de la colaboración con el Ministerio de Defensa”, declaró, por su parte el director del Cervantes.