<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>El Gobierno de Marruecos ha expresado, a través de un comunicado del Ministerio de Asuntos Exteriores, el malestar que le ha producido la decisión de las autoridades españolas hospitalizar en Logroño al líder del Frente Polisario, Brahim Ghali, sin informar antes a Rabat.</strong></h4> Marruecos ya había manifestado, días atrás, convocando al <strong>embajador español en Rabat, Diez-Hochleitner</strong>, su disconformidad con la actitud del Gobierno español, que argumentó “razones humanitarias” para acoger a Ghali, pero en la noche del viernes dejó por escrito sus advertencias a España. Así, aconseja al Ejecutivo español que <strong>no debe "minimizar el impacto grave"</strong> de la crisis actual entre los dos países causado por la hospitalización del dirigente polisario. Y afirma: "La actitud de algunos funcionarios del Gobierno prejuzgando la reacción marroquí y minimizando el grave impacto en las relaciones no pueden ocultar esta deplorable situación. Rabat axonsidera en el comunicado que la decisión de las autoridades españolas "<strong>no es una simple omisión",</strong> sino un "<strong>un acto premeditado, una elección voluntaria</strong> y una decisión soberana de España, de la que Marruecos toma nota" y de la que <strong>"extraerá todas sus consecuencias".</strong> Marruecos pone de relieve que, desde la llegada de Ghali, los responsables españoles "multiplicaron las declaraciones para justificar<strong> este acto grave y contrario al espíritu de asociación y buena vecindad"</strong>. Además, afirma que la explicación dada por Madrid sobre la acogida de Ghali por razones humanitarias<strong> "no justifica las maniobras tramadas a espaldas de un socio y un vecino"</strong>. "<strong>Las consideraciones humanitarias no pueden explicar la inacción de la justicia española</strong> cuando está debidamente informada de las denuncias documentadas" por presuntos delitos de detención ilegal, torturas y lesa humanidad de Ghali, y no explican "la complicidad en la usurpación de una identidad falsa" con la que presuntamente entró Ghali en España, subraya la nota. Marruecos concluye señalando que la <strong>preservación de las relaciones bilaterales</strong> con España es <strong>"una responsabilidad mutua</strong> que se alimenta de un compromiso permanente para salvaguardar la confianza mutua, mantener la cooperación fructífera y proteger los intereses estratégicos de ambos países". La ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, aseguró el pasado martes que España ya ha dado las explicaciones oportunas a Marruecos y dijo, que cuando acaben esas razones humanitarias, Brahim Ghali se marchará de España. Agregó, además que, si la justicia española entiende que Ghali debe comparecer, <strong>"no va a ser el Gobierno el que se interponga"</strong>. El <strong>juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz</strong> ha programado para el 1 de junio la comparecencia de Ghali para ser interrogado por las denuncias de genocidio, asesinato y torturas, pero fuentes jurídicas españolas dijeron a Efe que dudan de que pueda llevar a cabo el interrogatorio por el delicado estado de salud del dirigente saharaui, que ha pasado al menos dos semanas en cuidados intensivos.