The Diplomat
La Comisión de Asuntos Jurídicos del Parlamento Europeo aprobó ayer el informe que pide levantar la inmunidad europarlamentaria del expresidente de la Generalitat de Cataluña Carles Puigdemont, tal y como licitado el Tribunal Supremo a la Eurocámara para poder juzgar al político independentista en España.
A favor del informe se pronunciaron -en votación secreta- quince miembros de la Comisión, ocho lo hicieron en contra y hubo dos abstenciones, según explicó el presidente de ese órgano, Adrián Vázquez (Ciudadanos. En una comisión de 25 miembros, la suma de eurodiputados del PPE, Socialistas, Liberales y Conservadores supone 18 votos.
Este es el primer paso para que la institución europea responda formalmente a las autoridades españoles, si bien la decisión definitiva no se conocerá hasta que el mismo informe sea sometido al voto del próximo pleno del Parlamento europeo, previsto para la semana del 8 de marzo, informa Europa Press.
Aunque Vázquez consideró prematuro adelantar el resultado del voto del pleno, sí apuntó que, de manera general, las posiciones de las comisiones parlamentarias se suelen «replicar» en la votación plenaria ya que la proporción del peso de cada grupo en las comisiones corresponde con el del Hemiciclo.
Además de dar su visto bueno al suplicatorio de Puigdemont, la comisión de Asuntos Jurídicos aprobó igualmente los informes que avalan la suspensión de la inmunidad de los dos exconsellers de Puigdemont que huyeron con él a Bélgica y ocupan ahora un escaño en la Eurocámara, Toni Comín y Clara Ponsatí.
Si el voto del pleno de marzo confirmara la posición inicial redactada por el ponente, el eurodiputado conservador búlgaro Angel Dzhambazki, la inmunidad de los tres eurodiputados quedará suspendida y podrán reactivarse sus expedientes de extradición.
En el caso de Puigdemont y Comín, el Tribunal belga que debe decidir si ejecuta la Orden Europea de Detención y Entrega emitida por el Supremo suspendió el juicio hasta conocer de las autoridades españolas si prosperaba el suplicatorio. El caso de Ponsatí, por su parte, está pendiente en un tribunal británico ya que la reclamada reside en Escocia.