The Diplomat
El portaaviones Cavour, buque insignia de la Marina militar italiana, zarpó ayer de la base española de Rota, donde recaló el pasado martes durante su viaje a Estados Unidos. Allí obtendrá la certificación para operar con los aviones F-35B de despegue corto y aterrizaje vertical, que sustituirán progresivamente a los AV-8B Plus, según informa la Embajada italiana en una nota de prensa.
«Se trata de una actividad de carácter técnico-operativo con importantes implicaciones estratégico-militares para el país en la escena internacional», afirmó el embajador de Italia en Madrid, Riccardo Guariglia, quien, al no poder visitar la nave por el protocolo anti-covid, se puso en contacto telefónico desde Madrid con el comandante del portaaviones, el capitán de navío Giancarlo Ciappina, para darle la bienvenida a España.
El embajador destacó la importancia, también política, de la elección del puerto español de Rota para hacer la última parada antes de la travesía atlántica hacia la base norteamericana de Norfolk y formuló sus deseos, que pidió extender a toda la tripulación, para el pleno éxito de la misión en la que participará el buque durante varias semanas. «Como subrayó el ministro Guerini con motivo de la salida del portaaviones del puerto de Taranto, con los F-35B Italia se convertirá en uno de los pocos países del mundo que podrá disponer de la capacidad de un portaaviones con aviones de combate de quinta generación», añadió el embajador.