<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>Más de 37.000 personas emigraron de forma irregular a España desde el 1 de enero hasta el 30 de noviembre de 2020, de los cuales más de 19.500 lo hicieron al archipiélago canario, donde el incremento ha sido de casi un 882%, según los últimos datos del <a href="http://www.interior.gob.es/documents/10180/11389243/Informe+Quincenal+sobre+Inmigraci%C3%B3n+Irregular+-+Datos+acumulados+desde+el+1+de+enero+al+30+de+noviembre+de+2020.pdf/c7f4dee2-0055-4ee7-8c8c-f49c8df1efdb" target="_blank" rel="noopener noreferrer">Ministerio del Interior</a>.</strong></h4> En total, en 2020 han llegado <strong>37.213 personas a España, lo que supone un incremento de 7.612 inmigrantes (un 25,7%) respecto a los 29.601 correspondientes al mismo periodo en 2019</strong>. En cuanto a los <strong>inmigrantes irregulares llegados por vía marítima, el incremento ha sido del 49,3%.</strong> Concretamente, desde el 1 de enero hasta el 30 de noviembre han entrado en España por vía marítima y de forma irregular al menos 35.656 personas, 11.775 más que las 23.881 registradas en el mismo periodo del año pasado. Asimismo, en este mismo este periodo se han utilizado al menos 1.946 embarcaciones, con un incremento del 73,6% respecto a las 1.121 de 2019. Estas cifras son especialmente altas en el caso de los inmigrantes <strong>llegados a Canarias de forma irregular por vía marítima, con un total de 19.566 casos y un incremento de nada menos que de un 881,7% respecto a 2019 (17.573 nuevos casos respecto a los 1.993 del año pasado). </strong> <strong> </strong> En cambio, en la <strong>península y Baleares</strong> han entrado por vía marítima, en lo que va de año, 15.674 personas, <strong>un 23,9% menos que en 2019</strong> (20.604). Asimismo, 400 personas llegaron a Ceuta por este mismo procedimiento (con un descenso del 33,6% respecto a los 602 de 2019) y sólo 16 a Melilla, con un descenso de nada menos que del 97,7% respecto a los 682 inmigrantes irregulares de 2019. <strong>Por vía terrestre, el total de personas que han entrado en 2020 en las dos ciudades autónomas ha sido de 1.557, una cifra también claramente inferior (un 72,8% menos) respecto a los 5.720 del año pasado.</strong> <strong>El conjunto, la inmigración irregular llegada a España este año representa alrededor del 57% del total de la UE</strong>. En el caso de Canarias, que absorbe más de la mitad del país, más del 50% de los inmigrantes que han llegado irregularmente proceden de países subsaharianos, cerca del 32% son marroquíes y el resto de países del Sahel, según informaron fuentes del Gobierno. Según las mismas fuentes, la mayoría de las embarcaciones salen de Mauritania y Marruecos y el problema se ha complicado con el deterioro de la situación de seguridad en el sur del Sáhara Occidental y, sobre todo, con <strong>la crisis del COVID-19, que ha generado graves consecuencias sociales y económicas en países que viven en buena parte del turismo y que no disponen de los sistemas de protección social que hay en España y otros países europeos</strong>. La pandemia también dificulta sobremanera la repatriación de migrantes irregulares debido a las fuertes restricciones de entrada impuestos por los países africanos, especialmente Marruecos. El pasado 20 de noviembre, <strong>la ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, viajó a Ginebra</strong> para abordar esta crisis con António Vitorino, director General de la Organización Internacional de la Migraciones (OIM), y con Filippo Grandi, Alto Representante de la ONU para los Refugiados (ACNUR). Eses mismo día, <strong>el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska se desplazó a Rabat</strong>, para discutir sobre la cooperación migratoria con su homólogo marroquí, Abdelouafi Laftit.
