<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>Las encuestas otorgan ocho o nueve puntos de ventaja al candidato demócrata, Joe Biden, sobre el actual presidente de Estados Unidos, Donald Trump, a menos de un mes de que se celebren las elecciones presidenciales del 3 de noviembre, claramente marcadas por la pandemia, el racismo y la violencia policial.</strong></h4> Éstas son algunas de las conclusiones del seminario on-line <em>US Election 2020: Perspectives and the Democrats’ Agend</em>, organizado el pasado martes por <strong>la Fundación Alternativas y la Fundación Consejo España-EEUU (FCEEU) y </strong>moderado por Vicente Palacio, director del Observatorio de Política Exterior del Think Tank. Según Alternativas, las elecciones presidenciales de 2020 son <strong>“las más atípicas de las últimas décadas”</strong>, ya que no sólo estarán marcadas por la gestión de la pandemia y su impacto en la economía del país, sino por los <strong>“numerosos los focos de tensión que pueden incidir en el resultado electoral, entre ellos, el problema del racismo estructural y la violencia policial, la cuestión migratoria y la alarma medioambiental”.</strong> Por su parte, el secretario general de la FCEEU, <strong>Manuel Lejarreta</strong>, advirtió durante la presentación del acto de que en las elecciones norteamericanas hay “mucho en juego”, no sólo para Estados Unidos “sino para el resto del mundo, especialmente para Europa y España, aliados tradicionales de Washington”. Durante el encuentro, <strong>David Wasserman, House Editor de Coock Político Report, una de las más importantes referencias en el campo del seguimiento electoral en Estados Unidos</strong>, afirmó que “Joe Biden está dando una clase magistral, dejando a su oponente autodestruirse: no se está arriesgando lo más mínimo”. “En el primer debate no estuvo perfecto, de hecho, cometió algunos errores, pero el comportamiento de Trump fue tan negativo, incluso al salir del hospital, que ha recordado a muchos votantes la animadversión que sienten hacia él”, prosiguió. <strong>“En estos momentos, el presidente necesita una remontada milagrosa para ganar las elecciones”</strong>, aseguró Wasserman, quien, no obstante, recordó que en octubre de 2016 “todos pensábamos que Trump estaba acabado, pero finalmente se hizo con la Casa Blanca”. “Todos nos acordamos ahora de aquello, incluso cuando la gran mayoría de indicadores señalan una gran derrota para Trump el 3 de noviembre”, advirtió. En todo caso, precisó, las encuestas muestran Biden está por delante en los seis Estados clave, aunque por escasa diferencia en Florida o Arizona, mientras que Texas, feudo tradicional republicano, pudiera decantarse por Biden, igual que Ohio y Iowa. A juicio de Wasserman, está claro que Biden ganará el voto popular, incluso por más de cinco millones de votos. Por su parte, <strong>Roger Hickey, cofundador del Instituto para el Futuro de América, una organización progresista alineada con el Partido Demócrata</strong>, afirmó durante el encuentro que <strong>la pandemia y la crisis económica han “complicado enormemente” la posición de Trump</strong>, por lo que es muy probable que los demócratas consigan una “amplia victoria”. No obstante, admitió que la gran duda respecto a Biden es a si será “capaz” de consolidar su mayoría y de “activar la economía en un momento en el que parece que vamos a enfrentar una nueva y profunda recesión”. Aparte, Hickey no descartó una posible crisis constitucional en el caso de que resultado final sea apretado y de que Trump decida proclamarse ganador antes de tiempo