<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>Los ministros de Asuntos Exteriores de España e Italia, Arancha González Laya y </strong><strong>Luigi Di Maio</strong><strong>, defendieron ayer en Milán la consolidación del alto el fuego en Libia y advirtieron de que “no hay tiempo que perder” para una solución política “sin injerencias externas”.</strong></h4> <strong>“Estamos de acuerdo en la necesidad de impulsar un alto el fuego definitivo en Libia para buscar una negociación política, para eliminar cualquier interferencia externa y, sobre todo, para retomar las actividades extractivas, que puede ser la mejor manera de emprender una recuperación económica, también frente al COVID”</strong>, declaró <strong>González Laya</strong> en la rueda de prensa posterior al encuentro, celebrado en sede de la Prefectura en Milán. “Libia se encuentra en el momento de la verdad, no hay solución militar para Libia ni una solución importada y, sobre todo, no hay tiempo que perder”, advirtió la ministra, quien llegó ayer a Italia procedente, precisamente, de Libia, donde el lunes se entrevistó en Trípoli con los dos grandes impulsores del acuerdo de alto el fuego firmado el pasado 21 de agosto, el presidente del Gobierno de Acuerdo Nacional (GAN) y primer ministro, Fayez Serraj, y el presidente de la Cámara de Representantes, Aguila Saleh. <strong>“No existe otro camino que no sea el diplomático y político para resolver el conflicto”</strong>, declaró, por su parte, <strong>Di Maio</strong>, quien también efectuó a principios de septiembre una visita oficial a Libia con el mismo propósito de respaldar el acuerdo de alto el fuego. “No debemos engañarnos pensando que será un camino fácil, pero no hay tiempo que perder”, agregó, exactamente en la misma línea que González Laya. “Hay conversaciones importantes en marcha y es fundamental hacer entender a las partes que el alto el fuego y la desmilitarización de la zona de Sirte ayudarán a superar las dificultades y a la reanudación de la producción petrolífera”, añadió el jefe de la diplomacia. Asimismo, Di Maio rechazó las acusaciones a Italia por su papel en Libia. “Se nos ha acusado de jugar un papel ambiguo en Libia", cuando el objetivo de Roma, aseguró, siempre ha sido impulsar el diálogo sin tomar parte en el enfrentamiento, a diferencia lo que han hecho otros países, como Turquía, Rusia o Francia. “No hemos alimentado el conflicto. Siempre hemos estimulado el diálogo”, insistió. <h5><strong>COVID-19</strong></h5> Durante el encuentro, los dos ministros abordaron la lucha contra el <strong>COVID-19</strong> y, al respecto, González Laya envió, en italiano, “un saludo muy afectuoso a Lombardía desde un país, España, que entiende muy bien lo que ha pasado aquí”. Asimismo, la ministra española defendió la adopción de medidas coordinadas en el ámbito europeo para hacer frente a la pandemia. <strong>“Es necesario que sean lo menos dañinas posibles para la libre circulación, siempre garantizando la salud”</strong>, declaró González Laya, quien mencionó, entre las posibles medidas comunes en el ámbito de la UE, el aumento del número de test realizados y la reducción de los cierres unilaterales de las fronteras. Por su parte, Di Maio recordó que Lombardía fue “una de las regiones italianas más golpeadas por el COVID” y aseguró que había trasladado a González Laya “<strong>toda la solidaridad del pueblo italiano” con España, que “en esta fase atraviesa un momento crítico a causa de los contagios”.</strong> González Laya y Di Maio también dialogaron sobre el Fondo de Recuperación Europeo, la situación en el Mediterráneo Oriental (con el apoyo de los dos Gobiernos a la mediación de Alemania y del Alto Representante de la UE para Política Exterior y Seguridad Común, Josep Borrell, en la crisis entre Grecia y Turquía) y el nuevo pacto europeo sobre inmigración y asilo.