<h6><strong>Eduardo González</strong></h6> <h4><strong>Los Gobiernos de España y Malta defendieron ayer en Madrid la necesidad de encontrar una vía dialogada, en el seno de la Unión Europea, para poner fin a los conflictos que mantiene Turquía en el Mediterráneo Oriental con Grecia y Chipre.</strong></h4> “Desde el inicio de la crisis, España ha defendido el diálogo y la vía de la negociación”, declaró ayer <strong>la ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, durante una rueda de prensa conjunta con su homólogo de Malta, Evarist Bartolo. </strong> “España está <strong>apoyando discretamente los esfuerzos del alto representante (de Política Exterior de la UE, Josep Borrell) y de la Presidencia alemana” para resolver “las claras diferencias que existen entre Grecia y Turquía, pero, por supuesto, siendo solidarios con Grecia y Chipre, dos Estados miembros de la misma familia que España</strong>”, prosiguió González Laya, quien no se pronunció sobre la postura de Francia, partidaria de una línea más firme con Turquía, porque “no sería muy elegante”. Con este fin, recordó, ella misma realizó <strong>una gira a finales de julio por Turquía y Grecia</strong>, en la que ofreció la mediación de España para ayudar a “desescalar” la tensión, y <strong>el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, mantuvo esta semana dos conversaciones telefónicas con el presidente turco, Recep Tayip Erdogan, la última de las cuales se produjo ayer</strong>. Aparte, el jefe del Ejecutivo conversó la semana pasada en Córcega con <strong>el primer ministro griego, Kyriakos Mitsotakis</strong>, durante la Cumbre de países del sur de la UE. Por su parte, <strong>Evarist Bartolo</strong> (cuyo país ha sido uno de los principales impulsores de la UE en esta materia) advirtió de que el contencioso en el Mediterráneo Oriental “no sólo está relacionado con la delimitación marítima y los yacimientos de gas, también es una cuestión de soberanía en Chipre (cuya parte norte está ocupada por Turquía sin reconocimiento internacional), porque mientras no se resuelva este problema, el Mediterráneo va a estar siempre bajo la misma previsión meteorológica de marejada o fuerte marejada”. <strong>“El consenso no va a ser fácil, pero la alternativa sería mucho peor, sería un conflicto armado y los conflictos armados no hacen más que dificultar los acuerdos”</strong>, declaró. Por ello, advirtió, “como UE, nos interesa que haya un debate a fondo entre nosotros mismos y con Turquía”. <strong>“La UE no puede permitirse estar rodeada de vecinos hostiles y redunda en interés de la UE no reaccionar sólo con medidas a corto plazo”</strong>, añadió. El<strong> presidente del Consejo Europeo, Charles Michel</strong>, ha convocado una reunión bilateral sobre este tema para los días 24 y 25 de septiembre, en la que se analizarán todas las opciones, incluida la posible imposición de sanciones a Turquía. Durante la videoconferencia de los dirigentes de la UE del pasado 19 de agosto, los Estados miembros manifestaron su preocupación por las crecientes tensiones y expresaron su plena solidaridad con Grecia y Chipre por las actividades ilegales de perforación. Durante la conversación de ayer, González Laya y Bartolo coincidieron en su apoyo la búsqueda de una solución política en <strong>Libia</strong> “sin injerencias extranjeras” y firmaron <strong>un Memorando de Cooperación Académica entre la Escuela Diplomática y la Academia Mediterránea de Estudios Diplomáticos de Malta</strong> para la formación recíproca de diplomáticos y para “acercarlos, que se conozcan mejor y compartan análisis, perspectivas y soluciones”, explicó la ministra.