The Diplomat
El déficit comercial alcanzó los 7.573 millones de euros hasta el mes de junio, lo que supone un descenso del 48,5% respecto al mismo periodo del año anterior, según los datos publicados ayer por el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo.
Esta caída es consecuencia del descenso tanto de las exportaciones, que caen un 15,8% en la primera mitad del año por el impacto del COVID-19 en la economía, hasta los 124.101 millones; como de las importaciones, que con 131.675 millones, se reducen un 18,8% en el mismo periodo, informa Europa Press.
Según indicó la secretaria de Estado de Comercio, Xiana Méndez, el retroceso de los flujos comerciales en el primer semestre del año se debe a la incidencia de la pandemia a nivel mundial.
Al afectar esta situación en menor medida a las exportaciones que a las importaciones, se reduce el déficit comercial, «poniendo de manifiesto que las empresas españolas están en buenas condiciones para aprovechar la recuperación del comercio internacional a medida que vaya produciéndose», destacó Méndez.
La tasa de cobertura (cociente entre exportaciones e importaciones) se situó a cierre de junio en el 94,2%, por encima del 90,9% del primer semestre de 2019.
La caída de las exportaciones españolas está por encima de la media de la zona euro (13,1 %), pero por debajo de la de países como Francia (21,5 %).
El descenso de las exportaciones está relacionado principalmente con la evolución negativa de los sectores del automóvil, los bienes de equipo, los productos energéticos y las manufacturas de consumo, mientras que la alimentación, bebidas y tabaco incrementó sus ventas al exterior.
Las exportaciones a la Unión Europea, que suponen el 60,4 % del total, cayeron un 14,6 % en la primera mitad del año mientras que las dirigidas a terceros países cedieron un 17,5 %, un desplome especialmente significativo en las ventas a Oceanía (que bajan un 30,8 %), América Latina (26,9 %) y África (23,7 %).
Por comunidades autónomas, las exportaciones descendieron en todas las regiones salvo Extremadura, donde crecieron un 9,3 %, con caídas significativas en Canarias (30,2 %), Asturias (25,5 %) y País Vasco (22,9 %).