<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>Los ministros de Asuntos Exteriores de la Unión Europea comenzaron ayer en Berlín un debate para decidir si aumentan su presión sobre el régimen de Aleksander Lukashenko, tras la represión desatada en el país contra opositores y manifestantes.</strong></h4> A su llegada a la capital alemana, los representantes de<strong> los Países Bálticos</strong>, vecinos de Bielorrusia y que son quienes más firmeza están mostrando contra el régimen de Minsk, expresaron su intención de proponer que las sanciones que la UE está dispuesta a adoptar contra unos 15 ó 20 dirigentes bielorrusos implicados en la represión, incluyan al presidente Lukashenko. La reunión se prolongará a lo largo del día de hoy. El ministro alemán de Exteriores, <strong>Heiko Maas</strong>, que actúa como anfitrión por ejercer su país este semestre la Presidencia rotatoria del Consejo europeo, indicó que la UE está "comprobando en los últimos días" que Lukashenko ha incrementado la represión contra los opositores y los manifestantes pacíficos a pesar de las sanciones europeas. Los ministros, agregó, van a debatir por tanto cómo "elevar la presión" sobre el Gobierno bielorruso y si las sanciones actuales "son suficientes" para alcanzar el objetivo de la UE, que es que Lukashenko inicie un diálogo con la sociedad civil. Por su parte, la ministra española de Exteriores,<strong> Arancha González Laya</strong>, destacó por su parte, en unas breves declaraciones, las "altas expectativas" que está levantando en la UE el movimiento pacífico en Bielorrusia, por la posibilidad de "progresos" en "democracia y derechos humanos". Los Veintisiete también tenían en su agenda analizar las relaciones con <strong>Turquía</strong> -por las tensiones con <strong>Grecia</strong> en el Mediterráneo Oriental- y con <strong>Rusia</strong> -a raíz del envenenamiento del opositor<strong> Alexei Navalni</strong>.