Los aficionados a los videojuegos tienen esta semana una última oportunidad para disfrutar de la exposición ‘Gameplay’, un recorrido por la cultura del videojuego que tiene lugar en el CCCB de Barcelona. En un viaje hasta el origen de los videojuegos, así como por su evolución a lo largo de los años, esta exposición pretende dar un repaso a la importancia del sector y la huella cultural que ha ido dejando en la sociedad actual.
Precisamente, los últimos días de exposición coinciden con el estreno de la mini-serie ‘High Scores’ presentada por Netflix, un documental que repasa también la historia del videojuego, desde las recreativas hasta la guerra entre Nintendo y Sega, pasando por todos los avances tecnológicos que han permitido que este fenómeno cultural sea tan grande como es en la actualidad. El futuro de la industria, eso sí, está más abierto que nunca, y así lo demuestran los más recientes acontecimientos.
Y es que, con el tiempo, los videojuegos han ido evolucionando y lo que antes era solamente una experiencia para el jugador ahora es algo mucho más grande. Las ideas planteadas en la industria son cada vez más ambiciosas, se exige más al jugador e incluso se exploran nuevas narrativas que intentan acercar las diferentes historias al mando de una consola, de una forma más cinematográfica e inmersiva. Pese a ello, los juegos ‘arcade’ también son muy populares en la actualidad, con obras como ‘Valorant’ o ‘Fall Guys’, estrenadas este mismo año y que demuestran que, especialmente entre las nuevas generaciones, los videojuegos son más populares que nunca.
Los últimos acontecimientos del sector apuntan a que, en un futuro no muy lejano, este tipo de entretenimiento pueda incluso adaptarse a tendencias publicitarias, algo que revolucionaría el concepto que tenemos de los videojuegos y que demostraría, una vez más, el tirón que tienen entre el público. Se ha demostrado a lo largo de los años que, por ejemplo, el mundo del juego online genera grandes beneficios a lo largo y ancho de la red, por lo que no sería de extrañar que esas ideas se extendieran hacia otros terrenos.
Los casinos, que ahora utilizan estrategias de marketing como los bonos sin depósitos para atraer a más jugadores, son seguramente una de las industrias que más se ha aprovechado del gaming a lo largo de los años, puesto que sus slots se inspiran directamente en experiencias jugables que, además, tienen el aliciente del dinero tanto para la empresa como para el consumidor.
Pero el asunto no acaba aquí, puesto que incluso hay empresas que ahora utilizan los videojuegos como plataforma publicitaria. Por ejemplo, en el videojuego ‘Death Stranding’ vemos como la bebida Monster Energy tiene un papel muy importante; otro caso de lo más interesante es el de McDonald’s que ha abierto su propia plataforma de videojuegos para que los consumidores puedan conseguir descuentos para sus productos.
Todo esto nos hace pensar que el futuro del videojuego está aún por determinar, y que más allá de los avances técnicos y de las nuevas narrativas que se puedan llegar a plantear, aún hay un largo camino que recorrer. Hasta el momento, eso sí, podemos dar un recorrido por su pasado y por todo aquello que han llegado a aportar a lo largo de los años. Exposiciones como ‘Gameplay’ o documentales como ‘High Score’ son una gran manera de introducirse (o ampliar conocimientos) en un mundo que se ha convertido en un verdadero referente cultural durante las últimas décadas.